Normalmente, la restricción de la ingesta calórica, por desgracia, significa no comer, y este es el aspecto difícil de todo el proceso. No ser capaces de comer nada puede ser muy desalentador y puede tomar un poco de la alegría de la vida. Por otra parte, si no comemos, podemos sentir hambre y el estómago gruñir – nuestro cuerpo nos está diciendo que tenemos que comer, pero no está recibiendo la comida que pide. Nuestro estómago se siente vacío y más pequeños y, en general esto es lo que hace que sea difícil seguir nuestra dieta.
Así que si se pudiera comer alimentos con cero calorías, sería una manera perfecta para lograr nuestra meta de bajar de peso.
Por suerte, estos alimentos de cero calorías, en realidad sí existen – aunque son más conocidos como “alimentos de calorías negativas”.
Por supuesto, es posible comer algunas cosas que no tienen valor nutricional. Sin embargo, esto no es muy saludable. Y no es precisamente una manera de hacer más llevadera la dieta.
De hecho, los alimentos de cero calorías reales contienen algunas calorías y tienen valor nutritivo. Sin embargo, lo que los hace tan buenos para la dieta es el hecho de que necesitan más calorías para ser digeridos. En otras palabras, estos alimentos tienen muy pocas calorías, y son bastante difíciles de digerir porque contiene una gran cantidad de fibra. La digestión como cualquier otra función del cuerpo requiere energía para producirse y eso significa que toda la energía que se obtiene de los alimentos es contrarrestada por el proceso de digestión.
Entre estos están: espárragos, remolacha, manzana, limón, mango, piña, brócoli, col, coliflor, apio, mandarina, fresas, escarola, jugo de toronja, arándanos, lechuga, ajo, nabo, zucchini, rábanos.