Algunos alimentos y sus compuestos pueden interferir este proceso en diez etapas distintas de su desarrollo, de acuerdo con el doctor John D. Potter, de la Universidad de Minnesota.
Los compuestos de los alimentos pueden impedir la “activación” de los posibles agentes cancerosos. Pueden bloquear la mutación del ADN (material genético) de la célula. Recomiendo leer el articulo (los alimentos fuente poderosa para eliminar o inhibir las bacterias)
Pueden estimular en el organismo las enzimas encargadas de deshacerse de las sustancias cancerígenas. Pueden impedir la activación de los oncogenes causantes del cáncer.
Pueden combatir las bacterias relacionadas con el cáncer gástrico.
Pueden actuar sobre las hormonas y neutralizar los agentes tóxicos promotores del cáncer.
Pueden restarles a las células cancerosas la capacidad para proliferar y formar tumores.
Pueden inclusive evitar que las células cancerosas se dispersen para establecer nuevas colonias. Estos compuestos anticancerosos se encuentran en grandes concentraciones en las frutas y las verduras.
Principales alimentos con actividad anticancerosa: Aceite de oliva, ajo, albahaca, arroz integral, avena, bayas, cebada, cebolla, cebollino, cítricos (naranja, toronja, limón), cohombro, crucíferas (brócoli, coliflor, coles de Bruselas), cúrcuma, estragón, fríjol de soya, jengibre, linaza, mariscos, melón cantalupo, menta, orégano, papa, regaliz, repollo, romero, salvia, solanáceas (tomate, berenjena, pimiento), té, tomillo, trigo entero, umbeliferas zanahoria, apio, chirivía). Recomiendo leer el articulo (una tasa de yogurt al dia ayuda a evitar la vaginitis, candidiasis)
Algunos agentes químicos de los alimentos con actividad anticancerosa: Ácido elágico (uvas, fresas, frambuesas, nueces de nogal), carotenoides (hortalizas de hojas verdes, zanahoria, batata), catequinas (té, bayas), cumarinas (zanahoria, perejil, cítricos), indoles (repollo, bróculi, coliflor, col, coles de Bruselas), inhibidores de las proteasas (fríjol de soya, leguminosas, nueces, granos, semillas), isotiocianatos (mostaza, rábano picante, rábano, otras crucíferas), lignanos (fríjol de soya, linaza), limonoides (cítricos), sulforafano (bróculi, cebolla verde, col, repollo rojo, coles de Bruselas, jengibre, coliflor, lechuga de hoja roja), sulfuros de alilo (ajo, cebolla, cebollino).
También las vitaminas contrarrestan el cáncer, las vitaminas son agentes anticancerosos potentes.
La vitamina C, una de las más estudiadas, dispone de numerosas armas contra el cáncer.
Por ejemplo, puede bloquear la transformación de las aminas y los nitritos en nitrosaminas, mortíferos carcinógenos capaces de causar todos los tipos conocidos de cáncer.