En todo caso, Fernando se ha centrado más en el kilometraje acumulado y mantiene un ojo sobre los Red Bull, ya que Ricciardo ha sido mucho más rápido hasta ahora de lo que habían demostrado los RB10 hasta ahora: "En cuanto a fiabilidad creo que estamos bien, que hemos hecho un invierno bastante serio en ese sentido y hemos puesto una base en el coche sólida para poder evolucionar. En cuanto a prestaciones, habrá que esperar. Red Bull está teniendo bastantes problemas, da pocas vueltas, pero una que ha dado hoy está a una décima nuestra. Por tanto, asusta un poco cómo van las cosas, van a ser un rival fuerte también, pero vamos a centrarnos en lo nuestro y luego ya veremos dónde estamos", ha admitido el español.
En lo que llevamos de temporada, Fernando ha sido el piloto que más kilómetros ha acumulado a bordo de su nueva montura, seguido de cerca por Nico Rosberg y no tan de cerca por Kevin Magnussen. Ellos y la mayoría de los mejor clasificados montan un propulsor de Mercedes. Gutiérrez, séptimo en esta particular clasificación, sería el próximo Ferrari después de Alonso: "Dar siempre muchas vueltas es positivo en entrenamientos, ya que aprendes cosas nuevas y aparecen problemas que igual te sorprenden o que hubiesen aparecido en Australia, por tanto, es positivo. 660 kilómetros acumulados hoy que ojalá pondrán mañana al coche y a Kimi en una posición de intentar seguir evolucionando, pero en cuanto a prestaciones habrá que seguir esperando porque los tiempos son siempre muy extraños. Hoy veíamos a Hamilton detrás de Bianchi, cosas realmente impensables y que dan muestra de lo poco reales que son las clasificaciones en entrenamientos", ha explicado.
Fernando ha explicado cómo le ha ido su primera simulación de carrera en este 2014: "Estuvo bien. Pudo ser mejor porque tuvimos algunos problemas en las vueltas que tratamos de compensar con algunos cambios que podemos hacer en el volante y jugar un poquito. Pero por otro lado hicimos las 57 vueltas sin parar, con el coche bien en todo momento. Estoy contento en general. Encontramos una cosa en la parte de rendimiento, en la puesta a punto, que funcionó esta mañana, otras dos que no funcionaron, así que estamos en esa parte del invierno en la que pruebas tres o cuatro setups durante el día y tal vez una es positiva y las demás no".
En cuanto a la velocidad, a partir de mañana veremos por primera vez cómo el equipo de Maranello exprime el potencial de su coche: "Es un proceso de aprendizaje, importante en esta parte del test. Tal vez otros, viendo las vueltas que dan o que no dan porque no tienen suficiente tiempo en pista experimentan muy poquito con la puesta a punto. Podría ser mejor, pero aún tenemos dos días que son cruciales para nosotros en términos de rendimiento, porque realmente necesitamos explotar el potencial del coche, y mañana con Kimi y el último día debemos tener días tranquilos para llegar al 100% a Australia".
El último comentario no es baladí porque, a día de hoy, el auriga asturiano no está convencido de estar completamente preparado para el GP de Australia: "Probablemente no. No mucha gente dirá que está lista con cinco días de pruebas. Es como si vas al Mundial de fútbol, y te cambian la pelota, el tamaño del campo, etc. y te dan cinco días para tocar esa pelota. A todos nos gustaría tener más días y más experiencia, pero por otro lado, si veo el número de vueltas que he completado en cinco días, son probablemente más que cualquier otro piloto. Así que en cierto sentido, al ser lo mismo para todo el mundo, creo que estoy en una buena posición por experiencia y por vueltas gracias a que el coche de Ferari fue bastante sólido todo el invierno hasta ahora", ha dicho Alonso.
"Estuvo bien, sin grandes diferencias respecto al año pasado. No puedo detallar para los periodistas la carrera en sí misma, pero en cuanto al estilo de conducción no ha cambiado tanto. El año pasado conservábamos neumáticos desde la vuelta 1 en los stints, y este años conservamos desde la vuelta 1. Así que no cambia mucho. No creo que cambie tanto, pero obviamente los coches son más lentos, tienen menos downforce, en carrera tendrán menos potencia, porque tienes que cuidar la batería un poco, no puedes descargarla como en calificación, probablemente. Y el tiempo total de la carrera en las 57 vueltas será muy superior. Nos gusta conducir coches rápidos, no lentos, así que…", ha añadido.
"Sí, es diferente en tandas largas y en cualquier recta. En curva, la manejabilidad de los coches es algo diferente porque el turbo llega un poco de golpe, así que necesitas anticiparte a la potencia que va a llegar. También está la potencia en la recta porque es el ERS el que hace mucho del trabajo. El año pasado eran 80 caballos, este año casi el doble, así que notas mucho empuje cuando está activo, así que es definitivamente extraño".
"Los coches más buenos eran los V10, los dos o tres primeros años que estuve en la F1. Luego llegaron los V8, ahora los V6. Espero que no veamos los V4, o yo no estaré en la F1 probablemente entonces. Espero que las próximas generaciones no vean los V4".
"Creo que pasa lo mismo todos los inviernos. Llegamos a Australia y creemos que no estamos listos. Da igual cómo haya ido el invierno, todos los años tienes la misma sensación. El caso de este año es un poco más extremo porque hay muchas cosas nuevas en los coches que tenemos que experimentar incluso más. En ese sentido estoy contento de dónde estamos porque Ferrari ha hecho un gran trabajo todo el invierno para preparar este coche y somos uno de los mejores equipos y yo soy el piloto con más vueltas este invierno, eso me pone en una situación de ventaja ahora, y ojalá pueda usarlo en Australia para llegar un poco más preparado".
Nico Rosberg confeccionó una pequeña y jocosa tabla de jerarquías en la parrilla de 2014 para una televisión británica, pero Alonso no tiene tan claro dónde está cada equipo: "No tengo idea, iré a hablar con Nico para ver es lista, porque tengo curiosidad por ver dónde está todo el mundo. No tengo ni idea. Para ser sincero, no tenemos comparaciones o no pasamos tiempo en la competición, porque pasan muchas cosas en nuestro garaje. La curiosidad está siempre ahí, sobre dónde estamos… pero es difícil saber. Estoy contento por cómo han ido las cosas hasta ahora. Creo que podemos ser mejor en rendimiento y también en manejabilidad, en lo que hemos tenido tal vez demasiados problemas durante el día. Pero si veo dónde estamos al final del día y cuántas vueltas he dado, sé que otros equipos están peor", ha asegurado.
"Necesitamos estos dos días de test. Mañana con Kimi y al otro conmigo en el coche, necesitamos una prueba tranquila y con suerte intentar encontrar cierto rendimiento adicional en el coche", ha dicho el bicampeón.
"Cada vuelta cuenta, descubres problemas potenciales que son mejor verlos aquí que en Australia. Sin embargo, siempre hay una interrogación sobre lo competitivo que eres, pero probablemente hasta Melbourne no podremos contestar esta pregunta. Podríamos ser mejores en este momento por prestaciones, en cuanto a problemas que hemos descubierto, pero estoy seguro de que hay otros equipos que están peor que nosotros en este punto del invierno. Así que hay muchas cosas que hacer, pero con suerte llegaremos a tiempo para Australia", ha augurado Fernando.
De hecho, el objetivo del español no ha cambiado, y pasa por ganar el Mundial: "El objetivo siempre es intentar hacerlo bien y luchar por ganar a todo el mundo. Si estás en Ferrari y te digo que el objetivo es acabar las carreras y sumar puntos, te voy a mentir a ti a mí y a todos los seguidores. Por tanto, habrá que intentar luchas por el campeonato, pero sabemos que eso no es tarea fácil. Todo el mundo lo da por descontado porque somos quien somos, pero hay que llevarlo a la práctica y no va a ser fácil", ha dicho Alonso.
Después de completar tanto kilometraje, Fernando es quizá el piloto más autorizado para hablar de cómo cambia el estilo de conducción con los V6 Turbo: "No cambia demasiado, pero sí que hay pequeñas diferencias que tenemos que adaptarnos, sobre todo las salidas de las curvas lentas, que tenemos bastante poco agarre en la parte trasera y tenemos que controlar mucho más con el acelerador de lo que habíamos en el pasado. También creo que cuando sea una carrera en lluvia, este año será bastante más complicado, pero habrá que adaptarse. Es lo mismo para todos", ha concluido el piloto de Ferrari.