Edu, que lleva toda su vida añorando los bosques, pues han desaparecido ya de la Tierra, decide convertirse en investigador planetario en Venus, donde aún pueden encontrarse algunos. Pero los humanos que viven allí se han protegido refugiándose bajo una cúpula segura, pues temen todo lo relacionado con la naturaleza, y tienen prohibida la entrada en los «peligrosos bosques». Edu se opone a esta prohibición: él quiere experimentar eso que, según se estudia en los ordenadores, es tan peligroso. Con su lanzadera, decide aterrizar en el Bosque y salir a pasear por él. El peligro resultará muy diferente a lo que habría podido sospechar...
Novedad en el catálogo: Alto como una torre, ancho como el mar, Tonke Dragt (Siruela)
23.95 € 384 págs. abril de 2011