Andar es un ejercicio natural, por lo que andar descalzo aportará más beneficios que problemas para nuestro cuerpo y nuestra salud, no obstante debemos evitarlo en superficies dañadas o irregulares. Según expertos, se aconseja ir descalzo en superficies blandas donde el pie se pueda hundir. Un ejemplo sería la playa, por lo que me atrevo a decir, que aprovechemos el verano para ir a la playa y andar un poco en ella.
No obstante, es muy perjudicial andar descalzo por las calles de tu ciudad o de cualquier otra, puesto que puedes coger infecciones o dañarte el pie. Por este motivo, se recomienda el uso de calzado apropiado para cada actividad, juntamente con plantillas para conseguir esa comodidad que encuentras cuando vas descalzo por la playa.
No olvides que andar un rato al día descalzo aporta estabilidad y musculatura, pero la mismo tiempo ayuda a evitar estrés y a fortaleces las terminaciones nerviosas de los pies, provocando una sensación de relajación.