Animales de compañía como apoyo emocional.
El concepto de los animales de apoyo emocional hace referencia a animales que son considerados necesarios para la salud mental y psicológica del dueño. Este concepto surge originalmente en Estados Unidos y cada vez se va expandiendo a otros lugares. Normalmente, se emplean los animales como apoyo emocional en casos de ansiedad, trastorno de pánico, estrés postraumático, fobia social o bajo estado anímico.
Características de un perro como apoyo emocional.
Los animales de apoyo emocional no necesitan un adiestramiento específico. No obstante, es recomendable que tengan ciertas características. Por ejemplo, en el caso de los perros es adecuado que sea capaz de comportarse en público y acatar órdenes sencillas como estarse quieto, no morder o responder a su llamada. Sin estas características básicas, lo que se suponía que era un paseo tranquilo y relajante podría resultar una situación estresante. Además, no debe suponer una amenaza o ser peligroso para el resto de personas.
Para que su animal sea reconocido como un apoyo emocional debe ser certificado por un profesional. El tener un animal reconocido como apoyo psicológico ofrece beneficios o privilegios como viajar en los aviones cerca de los dueños. Para esta condición, se necesita que el animal tenga las características anteriores.
Beneficios de tener un animal de animal de apoyo emocional.
Tener un animal de compañía tiene ciertos beneficios. En el ámbito en el que nos encontramos, estos beneficios cobran mayor importancia. Tener un animal de apoyo emocional implica:
- Gestión del tiempo: la mascota necesita una serie de necesidades como salir a pasear, jugar, alimentarse o bañarse. La persona encargada adopta el rol de cuidador y de sus responsabilidades. Así, debe gestionarse y organizarse para cumplirlas.
- Salir de casa: son una importante motivación para poder salir de cama y de la casa, y comenzar a hacer actividades. En ocasiones, ayudan también a realizar ejercicio físico.
- Disminuir el sentimiento de soledad: las mascotas resultan un acompañante siempre que estemos en casa e, incluso, pueden serlos para salir a la calle. Esto ayuda a disminuir los sentimientos de soledad física y emocional, y a despertar emociones al interactuar con el animal.
¿Es suficiente con tener un animal de compañía?
Definitivamente, no. Si sufres algún problema de índole psicológica el tratamiento indicado es siempre la terapia psicológica. En el caso de que tengas un animal de compañía que consideres que puede ser o que ya es un soporte emocional, no sustituye a terapia, pero sí se puede integrar como una parte más del tratamiento psicológico.
En Psicólogos Málaga PsicoAbreu contamos con un equipo de especialistas que te ofrecerán un tratamiento psicológico adaptado a tus circunstancias, incluyendo a tu mascota como parte de la terapia.