El Tribunal Supremo revisa hoy el impresionante caso del joven que lleva 22 años en coma por una operación de cirugía estética. Antonio Meño y sus padres acampan desde hace 505 días en la madrileña plaza de Jacinto Benavente. Viven en la calle en una situación inhumana porque se les embargó el piso. Hoy es el gran día para ellos porque un nuevo testigo presente en la intervención quirúrgica, podría dar un vuelco a todo el proceso. Esperan que el alto tribunal anule la sentencia que les condenó a pagar 400.000 euros en costas. Ojalá la Justicia haga Justicia y esta familia pueda volver a vivir su infierno con dignidad. Retomo este estupendo vídeo, que lo dice todo:
LHD :: 20 años en coma