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He aquí un claro ejemplo de cómo un simple complemento puede elevar un look a la categoría más alta.

Durante el pasado mes de febrero y desde Londres, nos animaron a llevar con gracia la próxima temporada otoño/invierno, y aunque todavía nos queda todo el verano por delante, no queremos dejar de compartir con vosotros una de las salidas más llamativas a la pasarela. Con un enorme código de barras de fondo e idénticos outfits para las modelos, apareció Anya Hindmarch y su colección de complementos.

Posiblemente el nombre no os suene mucho (vale, tal vez no os suene nada) pero estamos seguras de que una vez veáis los complementos que lanzará en unos meses al mercado, no olvidaréis su nombre, su cara, ni sus diseños. Si no nos creéis, echad un vistazo.

Quién iba a pensar que con unas cajas de cereales, carteles de anuncios o incluso paquetes de detergente a modo de bolsos, podríamos salir a la calle sin que la gente nos mirara (bien o mal, qué mas nos da). El caso es que, quizás para nuestro día a día sean diseños demasiado llamativos y nos debamos/queramos conformar con otros más clásicos y a la vez más ponibles, pero...

Si el precio no fuera un problema, ¿caería en vuestras manos algunos de estos modelos?