Llevamos más de tres años de crisis económica, cada día, cuando nos asomamos a las noticias, lo que vemos es anuncio de zozobra, recorte de bienestar y de libertades.
Vemos extasiados al norte de Africa convulsionarse y sacudir los cimientos de regímenes impuestos, con daños colaterales como la represión Libia, o la amenaza de Al Qaeda, el acoso a los critianos, con asesinatos incluidos en Egipto.
El terremoto de Chile y el de Haiti.
Ahora el terremoto, acompañado de un enorme tsunami en Japón, como consecuencia una fuga radiactiva, con peligro de que alguno más de los núcleos, entre en fusión y dejen lo de Chernobil en una mera anécdota.
Miles de especies animales aparecen muertas en diferentes lugares, sin explicación. Con una nula repercusión en los medios, ¿alguién está tapando algo?
Esto toma tintes apocalípticos, en el mejor de los casos, podríamos decir que a la humanidad, le ha mirado un tuerto.