Apoyo emocional frente al cáncer de mama

Por 3contigo @3Contigo

El mes de octubre es un mes de sensibilización en la lucha frente al Cáncer de Mama, una enfermedad cuyo diagnóstico precoz aumenta las opciones de curación. La palabra cáncer ha dejado de ser un tabú gracias a la información que existe sobre la enfermedad pero también, gracias al ejemplo valiente de tantas mujeres luchadoras.

El cáncer de mama es una enfermedad que no solo requiere atención médica sino que también, necesita de un gran apoyo emocional porque desde el momento en el que la mujer recibe la noticia de que sufre cáncer de mama, desarrolla en su interior una cadena de pensamientos que dan lugar a sentimientos poco agradables y a emociones, como el miedo. Por eso el apoyo emocional ayuda a la mujer en la gestión de su mundo interno.

En 3Contigo evitamos hablar de paciente porque seguir sintiéndonos mujeres es fundamental a lo largo de todo el proceso de la enfermedad y porque, desde luego que es necesaria la paciencia para curarnos… pero nunca la pasividad.

Además, un diagnóstico de cáncer no sólo produce dolor emocional en quien lo recibe, sino también, en el entorno más cercano. Algunas personas, como consecuencia del miedo a no saber cómo actuar exactamente, se distancian. Ese miedo es muy humano, sin embargo, es importante mantener la naturalidad en el trato. Si tu tienes miedo, imagínate tu amiga, madre, esposa, compañera… que ha recibido el diagnóstico.

Puedes hablar con la pareja de la paciente o con sus padres para preguntarles en qué momento podrías hacerle una visita. Se trata de que tú te adaptes a sus necesidades y respetes su espacio.

Otra de las inquietudes habituales es la de no saber qué decir exactamente para ayudar. Sin embargo, lo que necesita una persona que sufre una enfermedad grave es escucha activa. No necesitas decir nada, ni ser un orador brillante, sencillamente muéstrate presente y escucha.

Para hacer frente a la desorientación de no saber cómo actuar exactamente, lo mejor es preguntar. Es decir, puedes preguntarle en qué puedes ayudarle. Por ejemplo, puedes organizar con ella planes de ocio porque es muy importante tener distracciones.

Piensa que esa persona sigue siendo la misma a pesar de que sus circunstancias sean distintas. Por tanto, comenta los temas habituales de los que solías hablar con ella. En la medida de lo posible mantén la cotidianidad.

Ofrécete a acompañarla al médico y apóyala para que haga todas las preguntas que tenga y resuelva todas sus inquietudes. La duda y la soledad generan un gran malestar interno.

Asegúrate de mantener una actitud positiva y ayúdala a que ella también lo haga. La música, la lectura y el contacto físico serán grandes aliados:

  • La música también se convierte en un estímulo de fuerza a nivel emocional. Escuchad canciones vitales y positivas como “Hoy puede ser un gran día” de Serrat, o “Mujer de mil batallas” de Manuel Carrasco, inspirada en personas que sufren cáncer de mama.
  • La lectura también puede ser un buen refugio emocional para cualquier persona que atraviesa la enfermedad ya que la magia de la ficción es una forma de evasión de la realidad. Una lectura compartida puede convertirse en un gran aliciente.
  • El contacto físico también es muy importante para dar y recibir cariño. Por ello, abraza y déjate abrazar. Sentirás y harás sentir un gran bienestar emocional.

Hay personas a las que les resulta útil estar en contacto con una asociación de personas que tengan la misma enfermedad y compartir con ellas esta etapa vital. No obstante, también hay mujeres que prefieren buscar el apoyo necesario en otras formas de tratamiento como las que ofrece 3Contigo en su programa de Coaching para la Salud.

Sea cual sea vuestra opción, recordad una máxima válida para cualquier enfermedad:

“Acepta el diagnóstico. Cuestiona el pronóstico”

Olga Albaladejo y Maite Nicuesa para 3Contigo Coaching