Factores como la edad, la herencia, el sobrepeso, malos hábitos al dormir o la carga de pesos de forma inadecuada son algunas de las causas de esta patología. Uno de los síntomas principales es el dolor en la columna lumbar, aunque en ocasiones el dolor puede irradiarse a las zonas más próximas, pudiendo doler la zona de las nalgas y la cara posterior del muslo El tratamiento incluye recomendaciones posturales y de hábitos de vida, medios físicos, fisioterapia y tratamiento farmacológico. El reposo sólo está indicado en el caso de aparición de dolor agudo, y no debe mantenerse más de 3 ó 4 días.