¡Saludos a todos por segunda vez en lo que va de miércoles! En el artículo anterior, os hablaba de una triste noticia de la actuación de la compañía Samsung chantajeando a un usuario con no cambiarle su smartphone a no ser que quitase de Youtube su vídeo de un Samsung Galaxy S4 defectuoso que se quemaba al cargarse. Tras eso, me toca volver con un nuevo artículo para la revista digital Tecnotitlan.net, y, para la ocasión, el protagonista vuelve a ser Samsung, y, para que no se diga que no somos objetivos y que no contamos tanto lo bueno como lo malo, en esta ocasión, la noticia sí que es positiva.
Como ya sabréis muchos de los que estáis al día siguiendo las últimas novedades en el mundo de los smartphones, sabréis que, en lo que respecta a Samsung, lo más esperado es el Samsung Galaxy S5, que está llamado a ser el tope de gama y uno de los terminales del año desde el momento en el que vea la luz. Sin embargo, la compañía Samsung, antes de lanzar dicho dispositivo, aún se guardaba un as en la manga, y es sobre él sobre lo que os hablaré a lo largo de las próximas líneas.
Para ser más exactos, os hablaré de Samsung Galaxy J, un terminal Android de gama alta que es una puesta al día en materiales y hardware del Galaxy S4. Respecto al primer aspecto, el de los materiales, el Samsung Galaxy J, por fin demuestra que se ha escuchado las demandas de los usuarios, quienes venían echando de menos un terminal de gama alta Samsung con un acabado metálico. Lo bueno del asunto, es que éste, por fin opta por incorporarlo, y, por cierto, lo hace sin que eso repercuta negativamente en las dimensiones o el peso del terminal respecto al S4.
Sin embargo, el acabado metálico, no tiene por qué ser por sí solo reclamo suficiente para que la gente apueste por el Samsung Galaxy J. La compañía, es consciente de ello, y por ese motivo, ha mejorado ligeramente las especificaciones técnicas del Samsung Galaxy J respecto al S4, haciendo que este tenga unas prestaciones más similares a las vistas en el último modelo de la serie Note de la misma compañía. De esta forma, quien no tenga un S4 y no quiera el tamaño de una Note, tiene en el J, una apuesta de lo más sugerente.
Entre las nuevas especificaciones técnicas de hardware que podréis encontrar en el Samsung Galaxy J, es necesario citar, por ejemplo, sus 3 GB de memoria RAM, su cámara de 13 megapíxeles, su procesador de cuatro núcleos a 2,3 Ghz, o su pantalla de 5 pulgadas con resolución Full HD. Respecto al precio del Samsung Galaxy J, en su país de origen, donde sale este mismo mes a la venta, cuesta unos 540 euros. Por el momento, no se sabe si llegará al resto del mundo, pero lo más probable es que sí lo haga teniendo en cuenta que terminales más minoritarios como el Samsung Galaxy Flex van a ver la luz en todo el mundo.
Para finalizar, me despido de vosotros hasta la cita diaria de mañana en la revista digital Tecnotitlan.net añadiendo que, el Samsung Galaxy J, estará disponible en modelos de distintos colores. Los elegidos, son tres. El rojo, el azul, y el blanco.