Dentro de sus múltiples propiedades, la más conocida es la de relajante y sedante. Ayuda mucho a estabilizar el sistema nervioso. Es un relajante natural que no crea hábito ni dependencia, su uso a través de la dilusión es recomendado para adultos y niños.
Ahora, si usted está sufriendo de insomnio causado por stress, tensión, preocupaciones o nerviosismo practique lo siguiente:
Tome un baño, si es posible de inmersión, con agua tibia. Al salir del baño, prepárese para dormir con ropa cómoda. En una toalla limpia o un algodón coloque una gota de aceite esencial de lavanda y al acostarse coloque el algodón o toalla cerca de su nariz. El olor que emana le ayudará a calmarse y a consiliar el sueño. También puede colocar una gota directo a la almohada.
Dulces sueños!