Aterriza como puedas

Publicado el 10 mayo 2012 por Jlmon

Analizar la odisea financiera española desde una perspectiva estrictamente técnica continua siendo posible aunque sinceramenteno estoy seguro de su utilidad a la hora de explicar al ciudadano medio cómo se ha llegado a esta situación. De hecho, las “excusas técnicas” comienzan a sobrar ante la cruda realidad de un colectivo profesional bendecido con la patente de corso otorgada por unos partidos políticos que les deben prácticamente todo menos el cuadro del fundador que preside sus sedes. Llamando a las cosas por su nombre, nos encontramos ante una clara situación de chantaje económico de la que difícilmente podremos escapar. Imaginen que acabamos de embarcar en el vuelo de una compañía aérea que goza de una imagen impecable. En principio, habíamos pensado adquirir un pasaje de clase económica dado que nuestro vuelo apenas llegará a la hora de duración. Sin embargo, los comerciales de la compañía nos acaban por convencer de que la vida es bella y todos somos fantásticos, ¿por qué no viajar a lo grande? No hay por qué preocuparse por el precio, comenzaremos a pagar en un año cuando ni nos acordemos de a dónde puñetas habíamos viajado. En fin, aquí nos encontramos viajando en Gold First Class, copa de cava de bienvenida, frutas variadas, sillón reclinable, pantalla led individual, menú de diseño, zapatillas con escudo heráldico y hasta un numerito musical a cargo de azafatas y azafatos. Todo parece ir bien hasta que despegamos y alcanzamos nuestra altitud de crucero. Repentinamente, desaparecen las zapatillas, el cava, las frutas y la madre que le pario. Una azafata mal encarada con pintas de haber sido despedida de Dachau por excesivo celo nos planta una banqueta destartalada en la que nos ordena sentarnos. Se activa el sistema de megafonía: Les habla el comandante, por si no lo sabían, nos deben ustedes cien mil eurotokomochos pedazo de cabrones… El avión comienza a caer en barrena, el caos se apodera de la cabina, gritos y sollozos… De nuevo la megafonía: ¡gilipollas! De nuevo les habla el comandante. Esta ha sido una advertencia… O pagan lo que deben o nos estrellamos contra la Giralda y de paso me van a regalar un chaleto en Waikiki, un rolex de oro y quince kilos de percebes gallegos o me tiro en paracaídas y aquí se quedan más tiesos que un pollo… La azafata carcelaria reaparece de nuevo con una hucha en la mano y una porra en la otra… Colecta para un Hermés al que le echado el ojo… El pringado del 1ªA suelta una moneda de dos euros recibiendoa cambio un porrazo en la calva…He dicho un Hermés tonto del culo, no frecuento el Corte Inglés… Megafonía de nuevo: les habla el alto representante de la dirección general del gabinete de asuntos jodidos de la presidencia del gobierno. No hay motivo para la preocupación, sus derechos están garantizados. Después de difíciles conversaciones con el consejero delegado de la compañía aérea hemos llegado a un acuerdo. El gobierno se hará cargo del chaleto, el rolex y los percebes así como de un fin de semana en Guadalajara. Por supuesto, todo ello con cargo a los presupuestos del Estado. Esto no hubiera ocurrido si nuestro partido hubiera estado en el gobierno hace cuatro años. Conserven la calma y, sobre todo, recuerden que mañana el futbol español hará historia… Oye, tú pringado, te habla el comandante, se me había olvidado comentar que me gustaría retirarme a escribir mis memorias así que necesito una pensión de tropocientos eurotokomochos a la semana… O pagas o estrello el avión en la Moncloa, tu mismo gilipollas…El avión entra de nuevo en barrena, vuelve el pánico…Les habla el comandante, esta vez no va de coña, se nos ha acabado el carburante, pero no se preocupen, está todo controlado, les dejó con el hilo musical que yo me las piró vampiro… ¡CRASH!