Atlántico Casa de Comidas by Pepe Solla

Por Amoras
Desde hace algo más de un año se pueden degustar los platos de Pepe Solla en Madrid, de la mano de su "Atlántico". Está el restaurante, Atlántico Casa de Comidas en la calle Velázquez y hay dos locales más, "Atlántico Casa de Petiscos", más informales, en Menéndez Pelayo y otro en Plaza Porta de la Mar en Valencia.
Reservamos para cenar en Madrid en el mes de Agosto, en horario casi infantil (a las 20:30) y el local estaba vacío.
La decoración, marinera y cuidada, acorde a la temática y los platos que se servirán. Tal vez por la hora, el servicio correcto aunque un poco desordenado, con demasiado tiempo de espera para pedir, o el pan (gallego, fantástico) que llegó una vez terminado el primer entrante.
La carta es tiene como base el producto gallego, con toques exóticos, no siempre del todo acertados. Pedimos:
- Bonito en agridulce de pimentón y algas: El pimentón era picante, y escondía en exceso el sabor del bonito.

- Pulpo a la llama con curry verde: Regular. A mi parecer, un producto como el pulpo admite pocas variaciones sobre lo tradicional

- Ración de empanada del día: Tradicional, aquí sí, y muy buena. Por ponerle un pero, tal vez podrían servirla un poco templada.

- Bacalao con pakchoy, papada y caldo de jamón ibérico: La combinación del caldo de jamón con pescado ya la habíamos probado en alguna ocasión. Combina bien.

- Pechuga de galo celta, garbanzos y aguacate: Nos advirtieron anteriormente de que la pechuga venía poco hecha, por estar marinada, pero a nuestro parecer, estaba en su punto.

Para rematar, para mi gusto, el mejor plato: "Me pierde el chocolate". Acertadísimo nombre para un postre abundante que agrupaba chocolate en todas sus variantes y texturas. Fabuloso.

Éramos dos con un niño y aunque parezcan muchos platos, las raciones eran pequeñas y no sobró nada. Al final, una cuenta no barata (96 €) por una comida con sabores peculiares.