A lo largo del año, movidos por las obligaciones de la rutina cotidiana y el trabajo no siempre tenemos el tiempo suficiente para pararnos a pensar en nosotros mismos. O mejor dicho, tal vez tenemos ese tiempo pero no siempre lo buscamos al dar prioridad a otros compromisos, aparentemente, más inmediatos.
El verano es una época muy positiva a nivel vital, un punto de inflexión en tu calendario vital ya que lo importante es aprender siempre cosas nuevas, hacer cambios y avanzar.
El verano es una buena época para pensar en ti y en qué te gustaría que fuera diferente a partir del mes de septiembre, practica el autocoaching.
1. Deja de vivir pegado al ritmo del reloj y siente el placer estival de improvisar planes. Pero por supuesto, dentro de unos horarios de comida y de sueño regulares.
2. Puedes tener una libreta en la que anotar esas reflexiones y pensamientos positivos que vienen a tu mente de forma inesperada. No dejes que esos pensamientos caigan en el olvido. Al ponerlos por escrito empiezas a darles forma.
3. Incluso en el caso de que te vayas de vacaciones en familia a algún paraíso estival, recuerda que es vital que busques espacio en la rutina para ti. Potencia tu independencia. El verano es una buena época para disfrutar de la lectura. Puedes regalarte a ti mismo un buen libro.
4. Aprovecha el tiempo. Existen personas que vuelven de sus vacaciones con la sensación de no haber hecho nada de lo que tenían pensado. Haz una lista de cosas que te gustaría llevar a cabo este verano. No anotes más de cinco ideas.
5. Alimenta tu tiempo de ocio al máximo: queda con tus amigos, disfruta de los planes veraniegos, por ejemplo, las terrazas de verano, pasear por la orilla de la playa, comer en la piscina o ir al cine al aire libre.
6. Comparte tiempo en familia. Disfruta con tu pareja, con tus hijos y, en especial, con tus padres. Conforme mayores son, más te necesitan.
7. Vive el presente, disfruta de tus vacaciones y de tu descanso. Si no lo haces, te arrepentirás al darte cuenta de que el tiempo pasa demasiado rápido.
8. Y prepara el futuro: Piensa en ti y en cómo es tu vida ahora mismo: ¿Qué cambios te gustaría hacer a partir del próximo mes de septiembre? ¿Qué ayuda vas a necesitar? Los pequeños pasos pueden ser los que marquen una nueva dirección en tu vida.
Maite Nicuesa Guelbenzu para 3Contigo Coaching