La autoestima se fundamenta en los pensamientos, emociones y creencias de cada uno. Si pienso mal sobre mí, si creo que no soy nada, si me comparo con los demás y sólo veo mis defectos… será necesario revisar mis pensamientos irracionales que, irremediablemente, me empujan a hundirme. Por lo tanto, la autoestima no depende de los éxitos externos dinero, éxito, poder, aprecio de los demás), sino de actitudes y valoraciones internas.
La autoestima se caracteriza por las siguientes particularidades :
- Tener confianza en uno mismo
- Estar satisfecho de sus logros
- Tener seguridad en uno mismo (toma de decisiones, conciencia de los puntos fuertes y débiles)
- Amor propio (conciencia de la propia dignidad)
-Auto-conocimiento (capacidad da auto-analizarse de manera objetiva)
-Auto-afirmación (defender los propios criterios ante los otros)
- Auto-aceptación (integrar mis defectos y cualidades, aceptarlos, mejorar lo que haga falta y aceptarse cómo uno es y no cómo cree que debería ser)
Cómo podéis comprobar, en la mayoría de las características anteriores hay un vínculo muy estrecho con las emociones y la Inteligencia Emocional. Así pues podemos afirmar que una persona con autoestima es una persona con una gran inteligencia emocional, y, a la inversa, si mejoramos nuestra Inteligencia Emocional, lograremos mayor autoestima.