El momento de realizarlo es muy importante. Debe hacerse inmediatamente después de un periodo, cuando las mamas no están inflamadas ni sensibles. Si se tienen reglas irregulares, se debe realizar siempre el mismo día.
Cómo realizar la autoexploración mamaria
Se debe comenzar con una inspección, colocándose delante de un espejo con los brazos apoyados en la cadera” en jarras”. Se observará el tamańo, la simetría de ambas mamas y la presencia en la piel, de cualquier alteración nueva como manchas, zonas irregulares o retraídas. Es importante observar detenidamente el pezón, en busca de grietas, zonas enrojecidas, hundimiento del mismo o secreción.
Una vez terminada la inspección, se procede a la exploración. La postura es importante. Se puede realizar de pie, colocando el brazo del lado a explorar, detrás de la nuca o tumbada, colocando el brazo del lado a explorar, sobre una almohada y detrás de la cabeza.
Se debe palpar, con las yemas de los dedos índice, corazón y medio, con firmeza para conocer la sensibilidad y tacto de su pecho.
Hay que recorrer la mama en forma ordenada y siempre del mismo modo. Se pueden seguir los siguientes esquemas
- en forma circular, empezando por el pezón, y yendo hacia afuera.
- en forma lineal, subiendo y bajando.
- en cuńas, dividiendo la mama en cuatro cuadrantes y explorando cada uno de ellos.
Se realizará de la misma forma en las dos mamas.
Es importante saber explorarse los ganglios, palpando por encima de la clavícula y debajo de la axila.
Se puede usar cualquier lubricante, vaselina, aceite… para facilitar la exploración, incluso realizarla en la ducha.
A veces, la pareja sexual, puede descubrir alguna irregularidad, no debemos desechar los comentarios al respecto.
La autoexploración debe realizarse todos los meses. Las mujeres con algún factor de riesgo como antecedentes familiares de cáncer de mama o con cambios fibroquísticos (fibromas) deben realizarlo con más interés.
En el caso de encontrar cualquier anomalía, por pequeńa que parezca, deberá ser consultada con el ginecólogo y en ningún caso dejarla pasar, ya que puede ser debida a una alteración benigna pero también puede corresponder a un problema maligno.