Últimamente tengo muy poco tiempo para cocinar. Aunque apenas se haya notado en el ritmo de las publicaciones (o eso espero), creedme cuando os digo que a duras penas saco tiempo para preparar alguna nueva receta, y no os digo nada de fotografiar el plato, editar las imágenes y escribir el post.
La culpa la tiene el máster que estoy estudiando. No es que sea complicado, todo lo contrario. Pero, entre las clases, los trabajos y los viajes, tras los que llego a casa rendida, sin el más mínimo ánimo de hacer ningún esfuerzo más allá de irme a la cama a dormir, me sobran unas poquiiiiiiísimas horas para dedicarle al blog.
Por eso, ahora tiendo a hacer recetas mucho más sencillas y rápidas, como la que preparé este fin de semana: unas cremosas barritas de tarta de queso de Nutella.
Deliciosas y sencillísimas.
Con la base de galletas Oreo. Crujiente. ÑAM!!
En casa nos encantaron. O eso parece. Porque no duraron más de una tarde.
- 24 galletas Oreo
- 55g de margarina fundida
- 450g de queso crema, a temperatura ambiente
- 2 huevos
- 130g de azúcar
- 50g de nata líquida para montar + 1 cucharada
- 160g de Nutella
- Precalentamos el horno a 160ºC. Cubrimos la base de un molde cuadrado de 20-22cm con papel vegetal y untamos la base y las paredes con margarina. Reservamos.
- En un procesador o robot de cocina, trituramos las galletas. Vertemos la margarina y volvemos a triturar hasta obtener una pasta. Cubrimos con esta mezcla la base del molde. Horneamos 12 minutos a 160ºC.
- Lavamos el robot y añadimos el queso, los huevos, el azúcar y 50g de nata. Trituramos hasta que todo se integre y no queden grumitos de queso. Vertemos dos terceras partes de esta preparación sobre la base horneada.
- Añadimos la Nutella y la cucharada de nata a la mezcla de queso restante y volvemos a triturar hasta conseguir una mezcla homogénea. Vertemos sobre la crema de queso que tenemos en el molde y, con la punta de un cuchillo, dibujamos una especie de marmolado.
- Horneamos 30-35 minutos a 160ºC. Dejamos enfriar por completo sobre una rejilla y reservamos en la nevera toda una noche. Cortamos en forma de barritas y servimos.