El vínculo del apego se desarrolla de niños y dependiendo de la relación afectiva establecida con los padres o cuidadores podemos desarrollar un apego seguro, ambivalente o evitativo. Según el psicólogo John Bowlby (creador de la teoría) “descubrir el tipo de apego que tenemos nos proporcionará las bases necesarias para conseguir el cambio, siempre y cuando, seamos conscientes que el tipo de apego que tenemos no nos es beneficioso en nuestras relaciones”.
Pero, ¿cuál es la base del apego?
La fuente de todo apego es la inmadurez emocional. La inmadurez emocional hace referencia a la poca aceptación de situaciones de vida incómodas o molestas. Una persona inmadura emocionalmente tiene ciertas dificultades a enfrentarse al sufrimiento, la frustración y la incertidumbre. Las 3 manifestaciones de inmadurez emocional son :
1) bajo umbral de soportar dolor : viven en el principio del placer y evitación del dolor. Personas que posiblemente hayan sido sobreprotegidas, contempladas en su niñez y que no han desarrollado la decisión y el coraje para enfrentarse a situaciones dolorosas. “No soy capaz de renunciar al bienestar” “No me importa que la relación sea dañina porque no puedo sufrir su pérdida”
2) baja tolerancia a la frustración : un esquema egocéntrico, si las cosas no son como deseo, me da rabia y me quejo. No soportan no conseguir lo que quieren, no sentirse como desean. No tienen capacidad para asimilar la frustración. “No acepto que mi pareja me abandone, quién se piensa que es para dejarme?” “No soporto el fracaso” “El amor es como yo creo y nada más”.
3) Ilusión de permanencia : personas con la firme creencia que el amor es inalterable y para siempre. Se apega a la pareja pensando que así creará más vínculo y la relación se mantendrá para toda la vida. “Es imposible que nos dejemos de querer” “Mi relación es eterna”.
¿Eres consciente que tiene alguna de las características anteriores? Quizás no te ha quedado demasiado claro, pero tampoco es necesario realizar ningún test sobre la dependencia, porque sentirse dependiente es más que un simple test nos lo confirme. Sentirte dependiente es ser consciente que tu vida gira en torno a tu pareja, que controlas con quién se relaciona, cuánto tarda, si te desea tanto cómo crees que debe ser. Quizás eres de los/las que piensa y siente que no puedes vivir sin tu pareja, que tu vida sin ella no tiene sentido y que te sientes feliz dependiendo del estado de ánimo del otro/a. Y si crees que has renunciado a relacionarte con tus amigos o a un proyecto profesional, si sientes miedo al expresar opiniones muy contrarias a las de tu pareja, si has cambiado aspectos propios para agradar más, si eres incapaz de decirle No a cosas que no te acaban de agradar….. ¡Cuidado! recapacita sobre tu relación, sobre tu forma de entender el amor. Porque depender de la persona que amas puede llevar a arruinar tu relación actual y posteriores y porque estás destruyendo, poco a poco, tu amor propio, tu respeto y tu propia esencia. Si ahora reconoces que quizás puedas tener un exceso de dependencia te aconsejo que busques solución, sólo así lograrás establecer relaciones sanas de pareja y disfrutar de una vida libre de ataduras.