Este producto suele aplicarse con un spray o difusor y su alto contenido en minerales (magnesio, calcio, zinc, selenio con propiedades antiinflamatorias, calmantes y antioxidantes) lo hace ideal para la época estival.
El agua termal de La Roche-Posay, Avène, Uriage y Vichy son las más conocidas en el mercado. Tienen propiedades calmantes: alivian las pieles irritadas, las rojeces y los picores; puedes aplicarlatras la exposición solar, depilación o afeitado.
Además de refrescar (ya te contamos que la podías llevar en tu kit del avión), fija el maquillaje, cuidan y protegen la piel de los radicales libres, descongestionan, calman e hidratan (en ambientes secos como la playa o la calle).
Cómo aplicarla: vaporízala sobre el rostro con una o dos aplicaciones del spray tras el desmaquillante. Te dejará la piel suave tras dejar que las gotas penetren tras unos minutos. Puedes aplicarte un tissue o algodón con toquecitos para que se vaya absorbiendo el exceso. Evitarás con ello la sensación de tirantez. Son para todo tipo de piel, incluso para las sensibles.
No debes confundirla con el agua micelar: ésta es una alternativa a la limpieza+tónico y una buena opción para las pieles sensibles. Calma y finaliza la limpieza facial aunque podrías utilizar un tónico después en el caso de las pieles grasas.
Las partículas o micelas ayudan a eliminar la suciedad, aunque los días en los que voy muy maquillada, utilizo un jabón desmaquillante y posteriormente remato la limpieza con el agua micelar. De manera que, puedes utilizarla como único producto jabón+tónico, después del desmaquillante para completar la limpieza o incluso utilizarla en primer lugar y después un tónico.
El agua termal no es un desmaquillante en sí y por ello debes utilizarla después de tu producto habitual de limpieza o en momentos puntuales cuando necesites aplicarla sobre el rostro para calmar.
Y vosotras, ¿refrescáis vuestro rostro con agua termal?