El finlandés cree que la combinación entre la aerodinámica del coche, el calentamiento de las gomas y el viento de la pista, es crucial para el buen funcionamiento de los neumático.
"Desde mi perspectiva, pienso que en términos de neumáticos, no hay una diferencia masiva en la repentina pérdida de agarre. Solo si la goma no está lo suficientemente caliente, lo que es fácil en ese tipo de condiciones, especialmente con los compuestos más duros. A veces es bastante difícil hacerlos trabajar".
"Con los compuestos más blandos, una vez que consigues ponerlos en temperatura, se siente mucho más la velocidad de deslizamiento respecto al año pasado. En cuanto al segundo día de test, tuvimos condiciones de mucho viento. En general los coches se sienten bastante enérgicos. Pienso que el viento hace un efecto mucho mayor ahora, porque la carga aerodinámica es más grande. Ahora los coches son más complicados de conducir", concluyó Valtteri Bottas.