Branding regenta los espacios de comunicación bidimensional

Por Mariamateria

La fábula de Aracne o Las hilanderas. Óleo, original de Velazquez, s. XVII. Ampliación, Juan García de Miranda, s.XVIII.
Mantenerse en un entorno sin darse opción al feed back entre iguales hace que esta escasa interacción ralentice cualquier aprendizaje social mediante las Experiencias compartidas, y dicho lugar, se vuelva hostil para quien decide frenar esa relación, o se despista erradamente, al transitarlo.
Esta progresión, poco a poco va empequeñeciendo ese natural recorrido, y a manos de gigante, va constriñendo todo lo que abarca hasta que ahogadamente, desaparece en la inacción de aquel cotidiano vivir al que alguna vez se perteneció y se le dio forma.
Branding conoce el aspecto profundo de cada acción orquestada hacia un fin común , y sobre todo, de lo que implica la fugacidad de tales instantes que comprometen la pervivencia de la empresa cuando ésta, desea crear Marca queriendo dejar su estela de distinción, a ser posible, vitalicia.
Branding reconoce y actúa en contra de la costumbre de retener y dar validez a lo establecido por reconocido, o porque siempre ha sido así sin más. Se ha dado valor a viejos éxitos de producción en venta compulsiva, pero hoy, son letales para quienes ambicionan la exclusividad de la venta de sus productos antepuesta, a la construcción de equilibrados vínculos con las personas que los usan. Por tanto, Branding encamina su propósito apoyándose en Marketing Experiencias quien diseña y ejecuta la comunicación bidimensional gestada en todos los puntos de encuentro con sus grupos de interés. La directa vivencia entre ellos genera momentos de intercambio en los que se darán los vínculos de confianza buscados, y a los que cumplidamente, se han de cultivar tanteándolos sin parar para obtener resultados prolongados.
La fábula de Aracne representada en sus dos dimensiones, conecta líneas de fuerza compositivas que amplifican la atmósfera enigmática enclavada por sus personajes. Nos adentra en el espacio de imágenes conjuradas por las manos del pintor que direccionan la visión del espectador haciendo vibrar la historia de un desafío entre dos mujeres, mortal y diosa, sostenida en momentáneas correspondencias de presente pasado y futuro.
Los usos de Arte se alimentan de los cotidianos lapsos del tiempo y saben envolver el espacio vital de su público cuidando, al detalle, cada momento de lo acontecido. Consiguen un calado de tal envergadura que puedes quedar impregnado del deseo de compartir y pertenecer a ese instante suscitado para el deleite.