Llegó el momento de dejar la mente en blanco. Liberarse del estres del día a día. Sin horarios, sin trabajo, sin cursos, sin citas y reuniones, sin tensiones...
Es tiempo de llenar la maleta con la ilusión de dirigir nuestros pasos a nuevos lugares y poder fijar nuestra mirada en paisajes de azul profundo y blanco intenso.
Llega el momento de unas pequeñas/grandes vacaciones.
En menos de nada estoy de vuelta...
Sed felices!