Investigadores del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía (INNN), en colaboración con el Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz (INPRFM), estudian el efecto que tiene la hormona dehidroepiandrosterona (DHEA, sustancia química producida de modo natural en el cuerpo humano y que se reduce con la edad) en diferentes sistemas de neurotransmisión involucrados en trastornos psiquiátricos y neurológicos.
De acuerdo con el doctor en Ciencias Médicas del INNN y titular del proyecto, Iván Pérez Neri, la depresión y la muerte neuronal se presentan de manera simultánea hasta en 75 por ciento de los casos de pacientes con enfermedad de Parkinson.
Aunque todavía no existen medicamentos utilizados para combatir a la par estos padecimientos, los investigadores del Departamento de Neuroquímica del INNN han estudiado por diez años la hormona DHEA. Uno de los neurotransmisores de mayor interés para los investigadores ha sido la dopamina, asociada con el estado de ánimo y el control del movimiento del cuerpo.
"Hay datos que apuntan la existencia de algo que no está funcionando bien a nivel cerebral y está causando depresión en un paciente con Parkinson. Esto sugiere la existencia de un enlace y un punto de convergencia entre estos dos mecanismos. Cuando experimentamos el efecto que tiene la DHEA sobre el sistema de señalización de la dopamina, nos encontramos con algo muy interesante: la hormona inhibe la actividad de la monoamino oxidasa, una proteína muy importante en Parkinson", señaló.
Al inhibir la DHEA la enzima monoamino oxidasa, se previenen los efectos que tienen la dopamina y otros neurotransmisores a nivel cerebral y que intervienen en la depresión y en la enfermedad de Parkinson.
"Esta enzima es una proteína que degrada los neurotransmisores del tipo de la dopamina o la serotonina. Esta monoamino oxidasa existe en las formas A y B. La primera está involucrada con la depresión, es decir, los inhibidores de esta enzima son antidepresivos. Respecto de la forma B, los inhibidores reducen la muerte neuronal que se ha observado en modelos experimentales de enfermedad de Parkinson. La hormona DHEA inhibe las dos formas de esta proteína", explicó.
Lo anterior sugiere que el tratamiento con esta hormona podría reducir la depresión y la muerte neuronal al mismo tiempo.
En estudios realizados con modelos de laboratorio, los investigadores inyectaron una concentración definida de la hormona DHEA en ratas, para luego extraer sus cerebros y separar partes específicas relacionadas con la depresión y los movimientos del cuerpo. Posteriormente se analizaron los fragmentos para determinar el contenido de los neurotransmisores y en qué cantidad funcionan las proteínas que degradan estos.
A raíz de los primeros experimentos, los investigadores continúan en la realización de estudios que permitan definir con mayor detalle el efecto de la hormona DHEA. Actualmente, en colaboración con el INPRFM se iniciaron experimentos en los cuales se implantó en ratas una cánula en una parte específica del cerebro para monitorear la liberación de neurotransmisores.
En palabras del investigador Pérez Neri, los resultados obtenidos hasta ahora abren la posibilidad de contar con un mecanismo o fármaco que podría reducir la muerte neuronal y la depresión simultáneamente.
El trabajo, financiado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), forma parte de la tesis doctoral del investigador Iván Pérez Neri y cuyos primeros resultados se han publicado en cuatro revistas científicas, así como en el libro Efecto de la DHEA sobre el metabolismo cerebral de la dopamina: Hormonas, estado de ánimo y muerte neuronal.