La fiebre de los unicornios y los colorines está en pleno auge, principalmente en las redes. Y este fenómeno es tan grande que incluso Starbucks lanzó hace unos días una edición limitada de su Unicorn Frappuccino: un batido mágico que cambia de color. Pero no todo el mundo tiene alma de purpurina y algunas personas no se sienten compatibles con los arcoiris.
La heladería americana Little Damage, ubicada en Los Angeles, pensó en quienes no tienen un espíritu colorido y tomó medidas. Por esto, lanzaron un cono y un helado de almendras completamente negros para que la gente de alma oscura también pueda disfrutar de comida acorde a su estilo de vida. El toque gótico está logrado gracias a la utilización de carbón vegetal, y su aspecto es realmente genial. De todos modos, la gente que lo compre también tiene permitido agregarle toppings si le parece demasiada oscuridad en su helado.