¿Parecía que no iba a llegar el frío? ¿Pensábamos que íbamos a estar a 12ºC todo el invierno? De eso nada, el invierno ha entrado y para quedarse y nada mejor con este frío y después de las pasadas fiestas en las que todos hemos comido todo y de todo que un buen caldo ligero, rico, sano pero eso si, como digo yo, con todo el sabor.
En casa nos encantan los platos de cuchara, y en cuanto llega el frío no hay semana que pase sin que prepare una recetita rica y calentita para las cenas en familia en las que nos apetece calentarnos por dentro y por fuera.
Ésta ha sido una de tantas, incorporar a un buen caldo de una gran variedad de verduras el toque especial del salmón que en casa también nos encanta y que además de color y originalidad aporta a este plato un sabor riquísimo.
Ingredientes:
- 2 cebollas pequeñas
- 4 zanahorias
- 2 nabos
- 2 trozos de apio
- 1/4 de repollo
- 2 rodajas de salmón
- 1 l. de caldo de pollo
- 500 ml. de agua
- Aceite de oliva y sal
Elaboración:
Sofreímos en aceite el puerro en ruedas finas y la cebolla picada con una pizca de sal.
Cuando comience a trasparentar le añadimos la zanahoria en ruedas y el nabo en cuadritos pequeños. Rehogamos 2 minutos.
Incorporamos el apio picado y el repollo cortado en tiras finas. Mezclamos.
Cubrimos con el caldo y el agua y cocemos a fuego medio al menos 30 minutos con la olla semitapada.
Limpiamos muy bien el salmón, le quitamos la piel y TODAS las espinas y cortamos en cuadros medianos.
Incorporamos a la cocción, corregimos de sal y volvemos a cocer a fuego suave 5 minutos.
Apagamos el fuego y dejamos reposar otros 5 minutos, con la olla tapada.
Podemos incorporar en esta fase de la preparación alguna especia tipo pimienta, curry, jengibre o media cayena para darle un sabor diferente cada vez.