Pese a la existencia de 19 calendarios oficiales y algunos no oficiales, a la inmensa mayoría de las personas que tienen alguna relación con las vacunas les parecería bien que hubiera un calendario de vacunación único, pero el deseo de tenerlo no es suficiente para conseguirlo.
• Las administraciones sanitarias conscientes de la conveniencia de converger hacia un calendario de vacunación único, ya establecieron en el año 1996 el calendario del Consejo Interterritorial de Sistema Nacional de Salud (CISNS).
• Las diferencias en los calendarios y las quejas de falta de equidad repercuten negativamente en la percepción de la sociedad sobre los programas de vacunación y condicionar actitudes de rechazo que ponen en riesgo la factibilidad de éstos. Las demandas de un calendario unificado procedentes de diferentes ámbitos se multiplican. Desde el CISNS se intenta clarificar el marco de decisión con la voluntad de evitar nuevas discrepancias entre CCAA.
• La creación de un Comité Asesor de Vacunas español, partiendo de la actual Ponencia de Vacunas, puede ser una estrategia idónea de participación de las sociedades científicas interesadas en la vacunación. Un órgano de este tipo podría ser clave para tener un programa de vacunación común que puedan compartir de manera voluntaria todas las CCAA, sin tener que renunciar a sus competencias, y al que se adhieran las sociedades científicas, dada la importancia capital de los profesionales sanitarios en la prescripción, consejo y administración de vacunas.
• La Asociación Española de Vacunología (AEV) y la Asociación Española de Pediatria (AEP) manifiestan la necesidad de un calendario común, la primera desde su carácter transversal y colaborativo, la segunda desde su trayectoria histórica y ambas desde un punto de vista científico y pragmático, adaptado a la realidad actual del país.
**Comunicado de la AEV y la AEP