Merecía la pena romper el silencio del blog por un motivo como éste. La Marató de TV3 celebra este año sus primeros 25 de vida y va a dedicar todos los fondos que recaude a la investigación sobre el ictus y las lesiones medulares y cerebrales traumáticas. Carlos Esteva, propietario y alma mater de Can Ràfols dels Caus (una de nuestras bodegas emblemáticas) sufrió un ictus hace más de un año. Y desde ese mismo momento, lucha y se esfuerza cada día por mejorar y por no dejar de hacer todo aquello que su pasión y su profesión (el vino) le piden. He tenido el privilegio de ser testigo de su tesón y su voluntad increíbles y si ahora nos pide que difundamos esta nueva actividad, lo hacemos con una sonrisa de placer y de complicidad en el rostro. Que es, siempre, la que él le muestra a lo que la vida le trae.
El próximo domingo 18 de diciembre de 2016, a las 12 horas (duración aproximada de 1 hora), la cita es en la nueva sala de barricas de la bodega. No se invita particularmente porque todos tenemos que pagar 10€ para participar en lo que será una cata singular, única. Por quien la organiza, por el lugar donde lo hace, por lo que ofrece, por lo que representa en el mundo del vino y como ejemplo de vida, por la causa de la investigación contra estas enfermedades y porque todos somos buenos, ¡o muy buenos!
Hay que pagar previamente la entrada (transferencia bancaria o ingreso) en la cuenta ES63 0081 1712 9300 0106 7708 del Banc Sabadell (abierta para esta actividad), indicando nombre y apellidos de quienes irán. Y cuanto se ingrese pasará, íntegro, a la recaudación de La Marató de TV3, porque Carlos asume por completo todos los gastos derivados de la actividad (vinos, músicos, material, etc.). Como cada año, el dinero que se recoja sufrirá un proceso impecable y transparente de distribución e irá a parar a grupos de investigación que lo transformarán en calidad y esperanza de mejor vida para las personas que sufren (o sufrirán) estas enfermedades.
Carlos lo dijo hace unos años (en el 2000): "hay que luchar por lo invisible". Creo que no hablaba sólo de sus vinos. Merece la pena, ¿verdad?