ALEX BAZAN - VIRTUAL ALCALDE DE CAÑETE
“La historia no se repite, pero rima”, Dijo Mar Twain, sabiamente hace mucho tiempo, hoy lo comprueba una vez más la opinión pública cañetana, confiada en sus predicciones estúpidas, carentes de fundamento y convenidas.Desde los años 80, cuando una gran mayoría decidió reelegir a un buen elemento en la labor edilicia hasta nuestros tiempos, la historia ha demostrado dos puntos muy importantes, que siempre debimos tomar en cuenta y nunca olvidar, como lo ha hecho la prensa local a través de sus medios:1 Los alcaldes que han buscado la reelección a la alcaldía provincial de Cañete, siempre terminaron en los últimos lugares, sin el cariño popular lejano a la preferencia y ajeno a los votos.2 Cañete nunca tuvo buenos alcaldes desde el retorno de la democracia en el Perú y la abrupta salida de David Palti Solano en su segunda gestión municipal.Hoy 5 de octubre del 2014, la historia nos da una gran lección: “Para ganar una elección y, sobre todo, conseguir la tan ansiada reelección hay que realizar un gran trabajo en el gobierno municipal. El poder económico que abastece una campaña electoral, el respaldo de las empresas privadas, las influencias, la gran ventaja de estar en el poder y, así lo nieguen, utilizar los recursos del estado para financiar sus campañas no lo es todo ni te reglan el triunfo.Importante: María Montoya no pierde porque no haya hecho una gran campaña (es evidente que su inversión ha sido notable), sino porque no ha hecho un buen gobierno. Sus continuos errores no han pasado desapercibido entre la población. Tampoco ha fracasado, porque haya sido víctima de una contra campaña o haya sido alcanzada por una extraña maldición de los medios opositores. Ella ha perdido por ir en contra de la historia y sin tener las armas y el conocimiento debido parta hacerlo.
Escribe: Guillermo Peña H.