Lady Angie extendió la mano para tocarle
-Te duele?
Henry sonrió con dulzura y le mantuvo la mano sobre su pecho
-Y a ti?
Angie le devolvió la sonrisa- No..y ahora qué?- un brillo divertido apareció en los ojos de la lady.
No era muy dada al romanticismo, le hacía gracia verse inmersa en una de las viejas leyendas de Jatte.
Ella, un espíritu libre y creativo, atada por una profecía a un lord guardián? no se lo habría creido nunca pero allí estaba. En medio de aquel paisaje hechizante, de esa naturaleza salvaje, frondosa se sintió salvaje también.
Dejó de pensar para empezar a sentir. Su parte racional se rebelaba....nononono. La atrapó con la mano, cerró el puño con fuerza, para dejarla sin respiración.....abrió la mano y sopló....su pepito grillo se esfumó en un suspiro.
Henry se mantenía a una prudente distancia. Notaba que en la lucha interna de Angie él empezaba a ganar puntos, quizás tuviera una oportunidad. Deseaba esa oportunidad con pasión pero sabía que debía esperar su decisión
Rocky se tumbó a sus pies y Henry le acarició despacio, notando el suave pelo del cachorro. Levantó la vista, Angie le observaba.
-Confias en mi?- le preguntó mientras seguía cariciando al cachorro
-Deberia?
-No puedo ayudarte con esa respuesta. Eres tú quien debe fluir y encontrarla en la corriente. Has probado a dejar de pensar y sentir? has probado a no controlarlo todo? has intentado alguna vez escuchar a tu propia naturaleza y alejarte del ruido de los que te rodean?
-Enséñame a hacerlo
-Necesitas creer en mi
-Creo en ti
-Entonces será fácil- se apoyó en las rocas y la invitó a sentarse a su lado-Primera lección....
To be continued.....
Rosemunde Lovelace