Dulce y goloso, el palosanto o caqui es muy apreciado por los niños. Su pulpa es gelatinosa, muy jugosa y sabrosa. Por su textura y contenido en azúcares, es una fruta ideal para hacer mermeladas, cremas dulces y para ser utilizada en diversos postres.
En cuanto a su valor nutricional, cuenta con importantes cantidades de hidratos de carbono (fructosa y glucosa), pectina y mucílagos (fibra soluble). Es una fuente rica en vitaminas, entre las que cabe destacar su contenido en betacaroteno (provitamina A) y vitamina C. También contiene potasio, hierro, magnesio, calcio y en menor cantidad fósforo y sodio.
En contra de lo que muchos puedan pensar, su aporte calórico no es muy elevado (65 calorías aproximadamente) por lo que puede ser tomado con moderación, en las dietas de adelgazamiento.
Es una gran fuente de antioxidantes, ya que contiene beta-carotenos, taninos, ácido nicotínico, ácido fólico y pectinas, entre otros. A parte de su aporte en nutrientes, el kaki tiene otros beneficios para la salud:
Contribuye a mejorar problemas de tránsito intestinal y estreñimiento, por su aporte en fibra y mucílagos.
Aumenta las defensas, ayudando a producir glóbulos rojos y blancos.
Refuerza la resistencia a las infecciones.
Incentiva la producción de colágeno, mucosas y huesos.
Es una fruta muy recomendada para niños en edad de crecimiento, personas con un gran desgaste físico, como deportistas o (runners), personas de la tercera edad, así como para las mujeres durante el periodo de lactancia y el embarazo.
Besos desde mi blog!!!