Carolina de Mónaco y un vestido para olvidar

Publicado el 13 julio 2015 por Guadalupe Cuevas González
Si, ya se que diréis que quién soy yo para enmendarle la plana a Carolina de Mónaco. Pues sin que sirva como justificación a esta crítica, me considero una admiradora incondicional de la todavía princesa de Hannover.


Sigo a Carolina desde que recuerdo y la he visto vestida de novia, de pastorcilla, sin pelo, en bikini y en topless. También con vestido de noche y playeros (aunque sean de Chanel).
Todavía tengo en la retina las fabulosas imágenes de su primer viaje de novios en parajes exóticos con una guirnalda de flores en el pelo. Así que no me digáis que la tengo manía, porque lo cierto es que la adoro en cuestión de estilo.

Por eso me dejó sin palabras el vestido que eligió para la Gala Figth Aids, en Montecarlo. El modelo llevaba impreso una efigie escultórica clásica, con un pecho y el ombligo a la vista.

Estoy sobrecogida por semejante alarde de mal gusto de mi adorada Carolina.
Y esto corrobora mi teoría que hasta las mujeres más elegantes pueden equivocarse garrafalmente. ¿Quién de ellas no ha tenido algún desliz en cuestión de estilo? Incluso Carolina de Mónaco.