El local, de tres pisos y 400 metros cuadrados, sigue la línea de los locales que la marca neoyorquina tiene por todo el mundo, donde dominan la madera y la piel, aunque en Tokio cuenta con elementos japoneses como esculturas, lámparas y las telas niponas que forran las paredes.
"Es como si fuera la casa o el apartamento de Carolina Herrera en Tokio. Esa es la idea de esta nueva tienda", la firma que ya cuenta con tiendas en Singapur, Shangai (China) y Seúl.
Como parte de su política de expansión por el continente asiático, Carolina Herrera planea además la apertura de los próximos meses de establecimientos en Kuala Lumpur y Bangkok.
En el local tokiota, situado en pleno corazón de Ginza, una de las zonas comerciales más exclusivas de la capital nipona, se venden desde hoy las colecciones de primavera/verano de hombre y mujer 2013 inspiradas en los años 50 y 60, además de complementos y maletas de la firma.
"Los japoneses son muy sofisticados, conocen la moda y aprecian la calidad", aseguró el portavoz de Carolina Herrera al definir a sus nuevos clientes.