Carolina se enamora, de Federico Moccia - Crítica literaria

Por Eltiramilla

Novedad 2011
Título original: Amore 14
Libro independiente
Clasificación: Novela realista
Nuestra edición: Planeta Internacional, 2011, 18’50 €
Valoración: 3 sobre 5

Carolina es una chica de 14 años que vive en Roma y lleva la vida de una adolescente cualquiera. Reparte su tiempo entre las clases, los momentos que pasa con sus mejores amigas Alis y Clod, y las discusiones con sus padres por salir hasta más tarde o porque quiere que le compren una moto con la que poder alcanzar esa libertad que persigue constantemente. Pero ante todo, Caro solo piensa en una cosa: enamorarse. Mientras llega ese amor tan esperado, varios chicos se cruzan en su camino, aunque por una extraña razón, todos los que acaban besándola no son el chico que ella está esperando, uno que le guste de verdad. Un día, mientras Carolina escucha un disco de James Blunt en una tienda, conoce a Massi, el chico perfecto. Con él pasará una tarde inolvidable y al separarse él le dará su teléfono, sin apuntar el de ella, con tan mala suerte de que ese mismo día le robarán el móvil a Carolina, por lo que sus posibilidades de volver a ver a Massi se esfuman. A pesar de que parece casi imposible que vuelva a cruzarse con ese chico misterioso en una enorme ciudad como Roma, Carolina no dejará de buscarle y de pensar en él. ¿Será Massi su gran amor? ¿Conseguirá volver a verle?

Un punto a favor de Moccia es que con él ya sabemos qué vamos a encontrar en sus novelas: mucho romance y las peripecias de un puñado de adolescentes con la ciudad de Roma como escenario inigualable. Sin embargo, en esta ocasión, aunque la lectura es tan entretenida y ágil como siempre, el libro cojea al faltarle una línea argumental sólida. Las aventuras de Carolina se suceden sin que realmente tengan una coherencia entre sí, parecen más bien una acumulación de anécdotas sin un nexo de unión entre ellas. Un gran acierto es el personaje de Carolina, con el que cualquier adolescente puede identificarse fácilmente y que a las lectoras más mayores nos puede recordar sin dificultad esa edad en la que los amigos, las fiestas y los chicos lo eran todo. Carolina cae bien, es simpática, divertida y nos hace pasar un buen rato con sus idas y venidas. Sus amigos también están bien dibujados, Moccia consigue hacer creíbles su forma de ser y de hablar, y crea tramas paralelas a la historia de su protagonista igual de entretenidas. Pero, curiosamente, no sucede lo mismo con los adultos del libro: los abuelos, los padres o el hermano mayor de Carolina parecen hablar con la misma voz, muy parecida a la de la protagonista, como si ellos también fuesen adolescentes; además, el autor se ha limitado a dibujar estereotipos, como el padre autoritario y poco cariñoso, la madre abnegada, la hermana odiosa o el hermano mayor protector y perfecto.


Carolina se enamora no puede contarse entre las mejores novelas de Moccia, le falta una gran historia de amor como en A tres metros sobre el cielo o una pareja que queramos que salga adelante como en Perdona si te llamo amor. Es un libro que, aunque hace pasar un rato agradable, es fácilmente olvidable. Encontramos en ella muchos fallos de escritor principiante, a pesar de que en Italia se publicó en 2008, años después de que sus novelas más famosas se hubiesen publicado ya. El hecho de que la vida de Carolina sea tan “normal” le resta la emoción de otras obras del italiano, así como la falta de un punto de enganche, ya que aunque queremos que Carolina se reencuentre con Massi, la novela se pierde en otros muchos detalles, dejándonos con un final de lo más previsible. A pesar de todo ello, Moccia siempre nos permite pasar un buen rato con sus libros y con Carolina se enamora vuelve a conseguirlo.