No es la primera vez, y tristemente tampoco será la última, que una gran empresa se sirve de la creatividad y el trabajo de pequeños diseñadores, usurpando sus creaciones y copiándolas de la forma más ruin y rastrera posible. Una vez más, David enfrentado contra Goliat, en una batalla cuyo resultado, gracias al poder de internet, ya no siempre está decidido de antemano. No seremos grandes pero sí somos muchos y podemos, al menos, gritar bien alto que se ha cometido una injusticia. Si tienes un blog, difunde, si tienes facebook, cuéntaselo a tus amigos, si tienes twitter, dilo a los cuatro vientos (se han creado las etiquetas #carrefourenenegativo y #carrefourplagia)... no dejemos que se salgan con la suya.
Y por supuesto NO compres las copias de Carrefour, o estarás contribuyendo a esta injusticia. Las copias no llegan ni a la suela del zapato a las originales. Si te gusta el trabajo de Lady Desidia y quieres lucir alguno de sus complementos no tienes más que localizar las tiendas que en tu ciudad venden sus piezas. Si vives o pasas por Madrid, ve directamente a La Antigua (c/Pez, 2), su tienda, donde además podrás conocerla en persona y disfrutar de su trabajo que es soberbio.
Este sí es el trabajo de Lady Desidia, a disfrutar de él: