Dije hace unos días que me estaba plateando esta duda:
De aquí al lunes y puede que más allá he de reflexionar si es compatible una organización transparente y democrática con la pseudociencia— X.M. Meijome (@EnferEvidente) 19 xaneiro 2017En realidad la verdadera duda no era esa sino la de si en pro de que los colegios profesionales se rijan por normas verdaderamente democráticas, transparentes y de buen gobierno soy capaz de omitir mi crítica al apoyo que desde algunos colegios profesionales se hace a las pseudociencias.
Y no, no lo soy.
No lo soy porque tal y como critico la "mala ciencia" (ensayos clínicos con diseños sesgados, no registrados, con resultados escondidos, investigadores financiados...) critico la pseudociencia por ser igual de engañosa. Ambos constituyen un fraude y un despilfarro de recursos y tiempo que tiene consecuencias para las personas.
Es más, veo más grave omitir la crítica a esas instituciones que a otras.
Lo es porque, de momento, la colegiación es obligatoria (con buen o mal gobierno, con o sin transparencia, con o sin democracia) y esa obligatoriedad se basa en que todos los profesionales hemos de estar bajo la tutela de un organismo que, se supone, garantice a la sociedad que somos verdaderamente profesionales titulados y cumplimos con la deontología.... pese a lo vaga que resulta su redacción:
Artículo 15Y la pseudociencia apoya tratamientos cuya supuesta eficacia es fácilmente desmontable con un sencillo ensayo realizado por una colegial y de cuya aplicación empiezan a abundar los casos de daños graves simplemente no pueden encontrar cobijo dentro de los colegios profesionales.
La Enfermera/o garantizará y llevará a cabo un tratamiento correcto y adecuado a todas las personas que lo necesiten, independientemente de cuál pueda ser su padecimiento, edad o circunstancia de dichas personas.
Podría dedicar tiempo a responder a los supuestos argumentos del documento de justificación de una comisión de "terapias naturales" en un colegio profesional, pero me quedo con esta perla:
"Los usuarios que demandan terapias complementarias, están solicitando en el fondo una atención personalizada, que el profesional les dedique tiempo, escucha, y se interese de verdad por esa persona en particular."Veo bastante explícito que no estamos hablando de un tipo de intervención en el que los resultados observados se sabe que no se deben a la misma.
Para mi la pseudociencia es algo que impulsa la imagen negativa de la profesión la haga una sociedad, una universidad, un colegio profesional o la mismísima Rosamaría Alberdi. ¿Como queremos que la sociedad nos tome en serio si nos empeñamos en vincularnos con estas cosas?.
Y que el colegio profesional proporcione "cobertura" a la pseudociencia es tan negativo para la imagen profesional como que tenga un "aula taurina", un palco VIP en un estadio de futbol o que impartiera catequesis a los colegiados no católicos.