Escuchar el corazón es un requisito fundamental a nivel de inteligencia emocional. Sin embargo, no sólo debemos escuchar el corazón sino también, poner razón a los sentimientos para evitar seguir el dicho que afirma que “el amor es ciego”. No hay mayor ceguera que la de quien no quiere ver. El papel de la razón es poner luz a los sentimientos en el amor para conducir un sentimiento de una forma óptima.
¿Cómo pensar con la cabeza cuando te enamoras?
1. En primer lugar, no niegues las evidencias de los hechos. Así sucede cuando una persona se deja llevar por el autoengaño o por las falsas expectativas y justifica constantemente en el otro actitudes que no justificaría en el caso de observarlas de forma externa. Imagina que aquello que te sucede a ti, le sucede a tu mejor amigo: ¿Qué le dirías en ese caso sobre la evolución de la historia? Este ejercicio de coaching es efectivo para ganar objetividad.
2. No existe mejor fórmula para pensar con la cabeza cuando te enamoras que la de dar tiempo al tiempo, ir despacio y sin prisa para afianzar una historia desde los cimientos. Es difícil saber en dos meses ni tampoco en medio año si otra persona es el gran amor de su vida. Por ello, el amor nos obliga a darnos tiempo para conocer la respuesta.
3. Escribir un diario emocional describiendo pensamientos, sentimientos y vivencias es una buena herramienta de autoconocimiento para reflexionar a través de la escritura sobre esa historia de amor. Además, la escritura de un diario permite un doble aprendizaje. Por una parte, te permite reflexionar en presente y por otra, puedes retomar las lecturas con más distancia tras el paso de los días.
4. En un momento de enamoramiento pueden resultar un tanto incómodos los consejos de los amigos más cercanos en el caso de que esos consejos rompan las expectativas personales. Sin embargo, son las personas que de verdad te quieren y te aprecian quienes desean lo mejor para ti. No se trata de tomar como una verdad absoluta las opiniones externas pero sí es importante escuchar sus consejos para valorar qué hay de verdad en ellos. Cuando eres sincero contigo mismo encuentras el equilibrio de vivir el amor de acuerdo a tu bienestar.
5. Pensar con cabeza cuando te enamoras supone no tomar decisiones trascendentales durante los primeros meses de relación, de lo contrario, esas decisiones pueden volverse en contra de uno mismo cuando cae la nube del enamoramiento. Es mejor no dar el paso de convivir juntos o de pasar por el altar durante los primeros meses de relación. Tampoco es recomendable que uno se plantee un cambio de ciudad y lo deje todo atrás.
6. Para pensar con cabeza en el amor es muy importante ser autocrítico y poner en su contexto el argumento de una película romántica para recordar que la vida es otra historia. Esto que parece tan evidente con frecuencia, bajo el impacto del enamoramiento no parece tan nítido porque el corazón aspira al máximo romanticismo. Sin embargo, no pierdas la parte pragmática de la vida en esa etapa porque el amor no se alimenta del aire sino que es importante tener fuerza de voluntad, interés mutuo, capacidad de sacrificio, deseo de hacer feliz al otro y de ser feliz uno mismo junto al otro…
Y muchas veces, por mucho que uno quiera, no encajan todas las piezas del puzzle porque en el amor también hay una parte que trasciende a la mente y a la voluntad. Ese es el misterio que mueve el amor desde el principio de los tiempos.
Maite Nicuesa para 3Contigo Coaching
Coaching personal, profesional y para la salud en Madrid y Figueras