- Limpiar 1 kg. de champiñones, cortarlos a trocitos, salar y espolvorear con harina.
- Sofreír en aceite, junto con 3 dientes de ajo picados, perejil y 1 vaso de vino blanco. Dejar cocer hasta que estén tiernos.
- Si se espesa demasiado antes de estar tiernos, se puede añadir un poco de agua.