Segúnn Alex Farquharson, director de la Tate Britain y presidente del jurado se trata de "el uso más profundo de un dispositivo tan prosaico como el iPhone que hemos visto en el arte hasta la fecha".
"BRIDGIT", uno de los dos vídeos que componían la instalación, es una pieza de 32 minutos, filmada por completo con un teléfono móvil durante el transcurso de un año. La película consta de imágenes de la artista, de 44 años, leyendo sus diarios, así como fragmentos de su vida cotidiana y sus viajes. En la narración que acompaña a algunas de las imágenes, Prodger relata experiencias personales sobre las dificultades que encontró al revelar su identidad sexual en la región rural escocesa de Aberdeenshire en la década de 1990.