El Gobierno de Chile ha presentado el programa de vacunación contra el virus del papiloma humano que comenzará la próxima semana. Lo hace en un contexto difícil para la vacuna, en Colombia es ya difícil sumar las hospitalizaciones e indisposiciones de chicas cuyos familiares apuntan a la vacuna como causa. En el ámbito mundial este fármaco está cada vez más cuestionado por sus daños.
La presidenta de Chile presentó ayer la campaña de inmunización contra el virus del papiloma humano.
Los casos de hospitalizaciones de chicas en Colombia no han parado de crecer. Incluso se han publicado nuevos reportes en otras partes del país como Nunchía (en Bucaramanga hay casos muy similares a los de España).
En ese difícil ambiente y de manera paradójica el ejecutivo presidido por Michelle Bachelet proclama su entusiasmo por la vacuna del papiloma.
“Estamos dando un salto histórico en la salud pública del país incorporando la vacuna del Papiloma Humano”, dice la presidenta chilena.
Yo no lo dudo, ya he publicado en ocasiones que estoy convencido -puedo equivocarme, claro- que nos encontramos ante el próximo escándalo sanitario mundial.
El Gobierno colombiano ya antes de investigar el caso de El Carmen de Bolívar se lanzó a proclamar la inocencia de la vacuna. Muy científico y transparente ¿verdad? Luego ha aplicado el manual de comunicación de los laboratorios fabricantes de la vacuna: acusar a las niñas de “estrés colectivo”, histeria y diferentes afecciones que tienen que ver con lo psicológico (es lo que decidieron científicos con claros conflictos de interés con dichas compañías en 2009 cuando surgieron en España los primeros casos de daños).
Se culpabiliza así a las víctimas y se deja de paso en evidencia las campañas de vacunación, que proclaman que todo se hace por la población pero sin contar con la población cuando esta sufre reacciones adversas.
Niña es vacunada en El Carmen de Bolívar.
En Colombia diversas autoridades políticas han pedido que se suspenda al menos de manera temporal el uso de esta vacuna.
El Gobierno chileno comienza pues una vacunación cuestionada en muchos países de todo el mundo.
Uno se pregunta si antes de incorporar la del papiloma al programa de vacunas se han molestado en informarse sobre cómo está el patio internacional. Por si acaso yo lo esquematizo:
-Japón ha dejado de recomendarla y sus médicos han de avisarlo así a quienes deseen ponérsela.
-En España se han interpuesto media docena de demandas judiciales por los daños de la vacuna y hay más en preparación. Además, pese a que la Administración sanitaria continúa negando el problema, ha comenzado a estudiar el asunto y se ha comprometido con la Asociación de Afectadas por la Vacuna del Papiloma (AAVP) a hacer un protocolo de actuación oficial y a informar a la sociedad sobre la vacuna, entre otras cosas.
-En Francia un tribunal médico ha reconocido los daños por la vacuna del papiloma y también se han interpuesto numerosas demandas en los juzgados. En este país se han desarrollado debates científicos de altura en los que se ha implicado el Gobierno y se han aportado pruebas de los daños de la vacuna.
-En Dinamarca también hay afectadas por la vacuna del papiloma humano que piden una moratoria en la aplicación de esta vacuna en concreto.
-India llegó a prohibir que continuaran los ensayos clínicos que hacían los fabricantes del medicamento porque se usó a niñas pobres como cobayas y varias de ellas murieron.
-En Estados Unidos el Programa Nacional de Compensación por Daños de las Vacunas que ha entregado casi 6 millones de dólares a 49 víctimas de las cuales dos murieron y 47 padecen secuelas graves.
Como recoge el diario colombiano El Tiempo de lo que les expliqué la semana pasada:
tienen que prevalecer la responsabilidad y la sensatez. La vacunación debería suspenderse hasta que las dudas y los casos conocidos se aclaren”.