Ya ha terminado la tercera jornada de CMFW. Ahora puedo decir, que desde mi punto de vista, esta edición esta siendo una de las que más me han gustado, y voy a destacar a dos diseñadores: Juanjo Oliva y Maya Hansen. ÚNICOS! Ayer podíamos ver unos diseños marcados por el color, con un aire divertido y desenfrenado. Hoy damos un poco la vuelta al asunto y nos encontramos con otro tipo de prendas.
Ion Fiz, con su colección Moka, nos trae modelos inspirados en la naturaleza, con estampados de bambú, de madera y de rocas a través de tejidos delicados como la organza o la seda entre otros. También podemos encontrarnos con tejidos reciclados de sacos de café de distintos países. Esta idea de modelos constituidos con tejidos ecológicos, ya lo pudimos ver en la colección de Roberto Verino de la primera jornada de CMFW. Hay diseños muy bonitos, y elegantes, sobre todo, me han gustado la colección de día, con unos colores muy naturales.
Lo de Maya Hansen conmigo ya no viene siendo normal. Hace ya tiempo que la sigo, porque soy una FAN INCONDICIONAL de los corsés y especialmente los de ella. Con esta colección que ha presentado en CMFW, no ha hecho más que sorprenderme más de lo que lo hace habitualmente. Ha ido más allá de una simple colección de corsés, sino que ha presentados más prendas con las que ha dejado boquiabiertos a los que se encontraban presentes en el desfile. Cuero, trenzas, brillos, pelo artificial... combinaciones que han dado resultados increíbles. Fabuloso! Creo que no hay palabra que lo defina mejor.
Juanjo Oliva ha sido otro de los diseñadores que me han hecho pasar una tarde maravillosa.Elegancia, simplicidad, glamour... es que su colección lo tiene todo. Vestidos largos en seda y con transparencias que han dominado toda la colección. El negro, el azul, el blanco, el rosa... ha sido un desfile maravilloso.
Por parte de Elisa Palomino lo que hemos podido observar son modelos con un aire romántico, evocando a lo sobrenatural, con muchas flores y transparencias. También hemos podido ver cuero, tul y bordados de temas oníricos. La verdad es que no me ha convencido mucho.
El desfile de Ailanto también me ha gustado mucho. Han sido quizá los que han puesto algo de color, junto con Amaya Arzuaga, a esta jornada en la que han sobresalido el negro y el blanco por encima de los demás. Tejidos de seda, con brillos, han dominado esta colección. Tonos que se encuentran dentro de la gama de los amarillos, como el mostaza por ejemplo, verdosos, negro... Y trazados muy sensuales, mostrando las curvas de la mujer, mucha feminidad.
Si a esta edición le faltaba sobriedad Lemoniez se la puesto toda con su colección. No me ha llamado mucho la atención, ni me ha gustado. Lo he visto algo aburrido, con colores muy apagados y tejidos invernales para una colección de Primavera-Verano. Predominaba el azul, el marrón y un poco el blanco. Con respecto a estampados, los modelos normalmente iban en liso, pero en algunos casos podemos observar algo retro, con lazadas pintadas.
Amaya Arzuaga por su parte ha presentado una colección repleta de color. La diseñadora, que utiliza mucho el negro en sus colecciones, ha cambiado un poco en esta ocasión y le ha otorgado a sus prendas un destello de color. El amarillo, el malva y el rojo dominaban por encima de los demás. Ha sido un desfile muy motivo, lleno de sensualidad y me ha gustado especialmente porque ha tenido en cuenta la feminidad, las curvas de la mujer.
Por último, Ana Locking, que ha cerrado este tercer día de la CMFW. Su colección estaba repleta de simbolismos geométricos por así decirlo. Elementos que se escondían tras pliegues y solapas.Tejidos de punto, tul, seda y algodón entre otros que se superponían. La utilización de colores ocres y tierra, y estampados de flores en varios modelos. Ha habido diseños y complementos realmente bonitos por parte de esta diseñadora.