Los estudiantes de Medicina se preocupan por el MIR. Es una preocupación más que razonable si tenemos en cuenta que su futuro profesional depende en gran medida de cómo hagan este examen a una sola carta.
Durante los últimos años, los estudiantes me preguntan qué deben de saber de Otorrinolaringología; yo les respondo que se la estudien porque se domina en un par de días y porque siempre caen, por lo menos, cinco preguntas, siendo más rentable que otras asignaturas.
A pesar de esto, hay personas que me preguntan qué es lo que "puede caer". Yo les respondo que hay cinco cosas de mi especialidad que se deben saber para el MIR, que son las siguientes:
1. Que ante toda supuración de oídos crónica que sea descrita en el enunciado de la pregunta como "fétida", se debería marcar la respuesta colesteatoma. Esto en la vida real es una gran mentira, porque todas las otorreas son bastante fétidas, pero bueno, así funciona el MIR.
2. Que toda embarazada que, en medio del bloque de preguntas de ORL, comienza a oír mal tiene otosclerosis. De nuevo otra falacia considerable, porque una hipoacusia en el embarazo puede corresponder a cualquier enfermedad.
3. Que ante todo derrame de oído medio unilateral en un adulto, están pidiendo que se marque una respuesta relacionada con la nariz y no con el oído. Esta pregunta, que se ha repetido hasta la saciedad en la historia del MIR, es muy importante, porque obliga a cualquier médico que se prepare el examen a recordar el despistaje del cáncer de cávum.
4. Que todo fumador con una ronquera de más de una semana de evolución debe ser revisado por un especialista, porque eso es un cáncer de laringe hasta que se demuestre lo contrario y, si tras ser revisado, se observa una lesión sospechosa, debe ser biopsiada. Esta pregunta también está bastante bien porque, cualquier médico debería estar alerta ante un paciente fumador con disfonía.
5. Que las reglas anteriores han funcionado hasta el momento en todos los exámenes, pero pese a eso deben ser aplicadas con precaución en exámenes futuros.
Espero que os sea de ayuda. Y por si acaso, la regla de oro: al dudar entre dos o tres opciones habiendo descartado las otras, lo más probable es que la respuesta correcta sea la número 4.
Foto: Cuatro en el "Number pinball" de Barrio Sésamo.