Un trabajo del médico-quirúrgico español Manuel Villanueva, especialista en prótesis de cadera y rodilla, ha sido seleccionado por la Academia Americana de Cirujanos Ortopédicos (AAOS, en sus siglas en inglés) para explicar en sus programas de formación continuada la técnica de desartrodesis de articulación de cadera, para devolver la movilidad a caderas que llevan rígidas muchos años.
En concreto, la desartrodesis o conversión de artrodesis en prótesis total de cadera consiste en operar aquellas articulaciones que hace 30 ó 40 años se dejaron rígidas por infección, tuberculosis, malformaciones o porque las prótesis no eran tan buenas como son actualmente. Una práctica que, según reconoce este experto, "bastante compleja" y actualmente "hay pocos cirujanos en el mundo capaces de enfrentarse a ella, en parte porque nadie le ha enseñado a hacerlo", según este experto, que trabaja como médico adjunto del Departamento de Cirugía Ortopédica y Traumatología del Hospital Gregorio Marañón de Madrid.
Por ello, Villanueva y su equipo presentaron ante la AAOS un video formativo que explica "de forma clara y didáctica" en qué consiste la técnica y cuáles son los 'pros' y los 'contras' de recurrir a la misma, ya que "puede ser interesante para formar o facilitar estas operaciones a otros cirujanos".
De lo que se trata es de recuperar la movilidad de estas caderas ya que, "al estar tanto tiempo sin trabajar, las articulaciones vecinas trabajan mucho más, se desgastan y hacen artrosis, en la columna lumbosacra, la cadera contraria o la rodilla del mismo lado donde se ha dejado rígida la pierna". Por ello, el doctor Villanueva destaca que, entre las ventajas de la operación, es que mejoran los dolores provocados por el desgaste de las articulaciones vecinas y recuperan diferencias de longitud en las extremidades inferiores.
"Cuando a estas personas se les pone la prótesis ganan en movilidad, aseo, confortabilidad, se sientan normales cuando antes debían echarse hacia atrás para tener la pierna rígida".
Este experto reconoce que, además de que la intervención dura entre dos y tres horas "por su complejidad", el hecho de que sean pacientes previamente operados hace que los resultados no sean "tan óptimos como cuando se pone una prótesis por primera vez".
Así, puede haber complicaciones en la propia cirugía y, además, tienen más riesgo de que la prótesis se afloje antes, "al igual que cuando se hace una segunda prótesis". De hecho, "los resultados se parecen más a los de la cirugía de rescate de prótesis que a los de una primera".
No obstante, asegura el tiempo que lleve el paciente con la cadera rígida no condiciona el resultado de la intervención ni la contraindica. "Un paciente puede someterse a esta operación sin ningún problema después de 40 años con la cadera rígida", concluye.
**Publicadom en "MEDICOS Y PACIENTES"