“Eliminar el concepto de residuo significa diseñar las cosas-los productos, los embalajes y los sistemas-desde su puro origen, pensando que no existe el residuo”
“Los envases no tienen porqué durar más que los productos que los contienen; pueden ser diseñados como nutrientes biológicos”
“La naturaleza actúa según un sistema de nutrientes y metabolismos en el que no existe la basura”
“Podemos crear construcciones que, al igual que los árboles, produzcan más energía de la que consumen y depuren sus propias aguas residuales”
“Las suelas de los zapatos también podrían degradarse de forma enriquecedora para el medio ambiente”
“Imaginemos un edificio como un árbol, una ciudad como un bosque…”
Estas ideas tan libres de viejas ataduras…¿no te invitan a tener las tuyas propias al respecto? Si se te ocurre alguna ponla en el comentario de esta entrada, compártela. Incluso la podemos mejorar entre todos. Cada uno somos una fuente, entre todos un río.
Si alguno cree que todo esto es quijotesco, le invito a informarse sobre las obras ya realizadas, como la “Rouge Factory” de Ford, en la que, entre muchas maravillas, posee un techo viviente, y que ha convertido un lugar fuertemente contaminado en un auténtico parque natural. Un mundo diferente es posible; mientras unos discuten sobre esta posibilidad otros lo están creando.
Si quieres leer una entrevista a William McDonough pincha en lo siguiente:
http://www.feedbacktoday.net/articulo.php?id=740&fb=89
Si quieres saber sobre su techo viviente y otros inventos pincha en la siguiente dirección:
http://www.wipo.int/wipo_magazine/es/2009/02/article_0010.html
Si quieres conocer su proyecto de la torre-árbol pincha en esta otra:
http://ecolosfera.com/treenscraper-la-torre-arbol/
El regalo “especial” lo he guardado para el final, es este vídeo, no te lo pierdas: