Comentario en La zona habitable estelar por La zona habitable estelar

Por Juanjogom @juanjogom

Por muy extendida y conocida que esté una hipótesis no tiene porque ser verdadera siempre.

Que una idea esté apoyada por nombres con peso dentro del mundo de la ciencia no significa nada. Lo bonito de la metodología cientifíca es que hay que demostrar lo que se postula.

Estamos hartos de ver cómo se humilla una y otra vez la estúpida obsesión del ser humano por creerse el modelo a seguir en el universo. Cada paso que avanza la ciencia suele ser una bofetada al antropocentrismo.

Es fundamental que seamos críticos con todas aquellas ideas que no nos convencen. Así ha avanzado siempre la ciencia y así debe seguir avanzando.

En los últimos días un estudio de la Universidad de Aberdeen, liderado por el profesor John Parnell, ha puesto en duda una de las teorías más aceptadas dentro de la exobiología, el concepto de zona habitable dentro de un sistema planetario.

El descubrimiento de planetas extrasolares de forma masiva, a pesar de que hace unas décadas muchos dudaban de su existencia (otra idea que nunca entendí), llevó a los astrónomos a intentar delimitar cuáles podrían presentar características favorables para desarrollar vida y cuáles no.

Considerando el agua como elemento fundamendal para el desarrollo de vida, luego hablaremos de eso también, los planetas demasiado próximos a su estrella la pierden por evaporación, y en los lejanos debería estar congelada.

Precisando más y según la wikipedia la zona de habitabilidad es “una estrecha región circunstelar en donde, de encontrarse ubicado un planeta (o satélite) rocoso con una masa comprendida entre 0,6 y 10 masas terrestres y una presión atmosférica superior a los 6,1 mb correspondiente al punto triple del agua, la luminosidad y el flujo de radiación incidente permitiría la presencia de agua en estado líquido sobre su superficie”.

Este concepto lo considero correcto para estimar aquellos planetas donde se podría encontrar agua líquida en su superficie, pero no para estimar cuáles tienen más posibilidad de albergar vida, en nuestro propio sistema solar tenemos pruebas de satélites como Titan o Europa que aun estando muy lejos de la supuesta zona habitable, son los mayores candidatos para sostener algún tipo de vida microbiana, más que planetas como Venus y Marte como siempre se pensaba.

Según los nuevos modelos presentados por el profesor John Parnell, de la Universidad de Aberdeen, los planetas pueden recibir calor de dos formas: directamente de su sol o desde el interior del propio planeta. Al descender a través de la corteza, las temperaturas aumentan e incluso cuando la superficie está congelada, puede haber agua en el subsuelo.

Otro de los investigadores del proyecto asegura que: “Si se toma en cuenta la posibilidad de biosferas profundas, habrá problemas para conciliar esa información con la idea de una estrecha zona habitable definida solo por las condiciones en la superficie”.

Todo esto nos lleva a pensar que, si ya en nuestro propio sistema solar somos incapaces de delimitar donde puede haber vida y donde no, mucho más dificil lo será en sistemas extrasolares situados a miles de años luz nuestro.

Según nuestra mirada antropocentrista de la formación de vida sería más fácil encontrarla en lugares con agua líquida en la superficie, rodeada de condiciones ambientales similares a las nuestras, bajo la presencia de una atmósfera similar a la terrestre y sustentada por elementos como el carbono, el nitrógeno, el oxígeno y el hidrógeno.

Pero si algo nos ha enseñado los distintos descubrimientos sobre el universo que nos rodea es que la visión antropocentrista suele fallar. Y poco a poco nos iremos dando cuenta que, quizás, la vida no necesita el agua como condición imprescindible para existir, que las condiciones de temperatura y presión atmosférica pueden ser enormemente variables y que, a lo mejor, el carbono no es la única pieza fundamental para construir un ser vivo.

La vida es la evolución natural del universo, y como tal proceso evolutivo busca, a lo largo de millones de años, diferentes soluciones para salir adelante. Estoy convencido que habrá lugares donde nuestro concepto de vida se cumpla a la perfección, pero también que habrá muchos más donde no.

Si no estás dispuesto a la humillación de tus ideas no pierdas el tiempo investigando.