En general, los peces de agua fría contienen los aceites más saludables para el corazón que aquellos de agua cálida. El salmón, el atún, el arenque, la caballamy las sardinas son las fuentes más ricas de ácidos grasos omega-3.A diferencia de la carne, el pescado es bajo en grasas saturadas que obstruyen las arterias. Además, el potasio, el magnesio y la niacina en el pescado ayudan a disminuir la presión arterial y aumentar el nivel de colesterol bueno.Para su conocimiento, la verdadera clave de las propiedades que aumentan el bienestar, se encuentra en los ácidos grasos omega-3. Estos aceites del pescado ayudan al corazón en muchas formas: protegen las arterias de los daños, al evitar la acumulación de las plaquetas, y también aumentan los niveles de colesterol bueno, disminuyen la presión arterial y los niveles de triglicéridos, y previenen arritmias cardíacas que pueden conducir a la muerte súbita. Un reciente estudio realizado a más de 3 mil personas, hizo posible que los investigadores encontraran que aquellos que consumían cerca de 2,5 porciones de pescado por semana tenían un riesgo 29% menor de latidos anormales y mortales en el corazón que las personas que comieron menos pescado.Debido a la evidencia de las propiedades protectoras del corazón que tiene el pescado, los especialistas recomiendan comerlo dos veces por semana. Importante: Si quieres beneficiar a tu corazón, opta por los pescados. Si agregas el pescado a tu dieta o tomas suplementos de aceite de pescado, los ácidos grasos omega 3 ayudarán a mantener tu corazón saludable ahora y en el futuro.