Durante la época estival es habitual consumir alimentos muy calóricos (aunque no lo parezca) y acabar comiendo mucho más de lo habitual (helados, tapas, bocadillos, picoteos, etc). Los excesos ( como el consumo de alimentos grasos, azúcar, alcohol y el poco descanso) no solo tienen consecuencias en el peso, sino también afectan de forma negativa y directa a la salud de la piel, apagándola y deshidratándola. Si a eso le añadimos los efectos negativos del sol, cloro en piscinas y demás excesos que hayamos podido tener este verano... peor que peor.
La mala alimentación y el poco descanso pueden incidir negativamente en la salud de la dermis. A todo ello se le suman los dulces propios de esta época (helados, granizados, horchatas, bebidas azucaradas) y un mayor consumo de alcohol.
Así mismo, trasnochar durante los días festivos no ayuda a levantarse con buena cara. Los procesos de recuperación y reparación de la piel tienen lugar mientras se duerme, sobre todo en la primera fase del sueño, y por ello es básico mantener unas mínimas horas de descanso. Todos estos agentes provocan que la piel se muestre más opaca, apagada y deshidratada.
1.- Más allá de intentar moderarse (todo lo que sea posible) con las cantidades de comida, es importante beber abundante agua (mínimo 1,5 o 2 litros al día).
2.- Incorporar en nuestras comidas la ingesta de vegetales verdes. Un buen truco es recurrir a caldos depurativos, infusiones o tés (templados como mucho, pero no fríos) para conseguir un efecto antiinflamatorio y descongestivo. Los zumos ricos entambién nos ayudarán a contrarrestar los efectos del alcohol y los excesos.
3.- Si se descansa poco y al levantarse los ojos están muy hinchados, con bolsas y ojeras, es recomendable aplicar unos parches descongestionantes o unas compresas de agua fría (valen bolsitas de té usadas bien frías de nevera) durante cinco o diez minutos.
4.- Es aconsejable utilizar tratamientos cosméticos de efecto detox, nutritivos, hidratantes y flash. Un gran ayuda puede ser el nuevo tratamiento de Dior que se lanza al mercado este mes de septiembre. Una maravilla para la piel, proporcionando una piel más descansada y con un aspecto más fresco. (He tenido ocasión de probar una muestra del mismo y os puedo asegurar que es una delicia para el cutis y más como el mío a los 50 años. Mi piel va a ser adicta a este nuevo tratamiento DIOR).
Pero vayamos por el principio: aportar tono, luz y ONE ESSENTIAL SERUM DIOR, se ha reformulado con ingredientes activos para nutrir la piel mediante su contenido en ácidos grasos (alga, longoza), aminoácidos (bulbo de lirio blanco), energía a la tez mediante vitaminas (cáliz de hibisco), azúcares vegetales (haberlea) y minerales (longoza) y detoxificarla (hibisco Según sus propios estudios, en cuatro semanas la piel está más elástica, luminosa y viva.
El hibisco contenido en su fórmula favorece la eliminación de las toxinas mitocondriales y ayuda a potenciar la actividad de la Lon Proteasa, que los recicla para generar nuevas proteínas. Se estimulan los sistemas naturales de eliminación, reciclado y regeneración de la piel. El círculo potencialmente vicioso (acumulación, saturación, bloqueo) se transforma en un círculo virtuoso. Pero eso no es todo:
!La renovación celular se pone en funcionamiento de manera rápida e intensa dando paso a una piel radiante y bella!
Espero que estos consejos os puedan ser de utilidad para poner la piel a punto frente a las agresiones que nos van a llegar en el otoño, sobre todo los que vivimos en grandes ciudades con sus atascos, tubos de escape y otros contaminantes, por no hablar del estrés post vacacional y el cambio de estación al otoño, una época en la que la piel suele resentirse si no se trata con mimo y amor.
¿Y vosotros? ¿Habéis comenzado a notar los efectos de los excesos en vuestra piel? ¿O peso? ¿Soléis cuidaros en estas fechas? ¿O dejáis que la naturaleza siga su curso? Estaré encantada de leer vuestros comentarios!
Besos desde mi blog!
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