Cómo ayudar a mi hijo a ser más seguro de sí mismo

Por Psicmarissa @m_glover21

¿Cómo ayudar a mi hijo a ser más seguro de sí mismo? Es una pregunta que se hacen muchos padres de manera frecuente ya que todos sabemos que tener confianza en uno mismo es de vital importancia para el bienestar emocional de cualquier persona.
Por lo que es normal que los padres se interesen por desarrollar la autoconfianza en sus hijos para que puedan crecer cada vez más confiados y enfrentar los desafíos que pueden ir apareciendo en su vida.
Pero, ¿qué hacer para ayudar a los hijos a sentirse más seguros? A pesar de que cada niño es diferente, existen algunos consejos generales que se pueden llevar a cabo para fomentar la confianza en los hijos, los cuales veremos a continuación.

Cómo ayudar a mi hijo a ser más seguro: 10 consejos


  1. Tiempo de juego: Aunque para muchos no lo parezca, el tiempo de juego con los hijos es esencial para ayudarlo a ser más seguro de sí mismo(a).

    Dedicar tiempo para jugar con los hijos les demuestra lo valiosos que son y lo importante que es para los padres aquello que tanto disfrutan.

    Por lo que no solo se trata de “fingir” que se está jugando con ellos ya que esto será percibido por los niños, sino que cuando se está jugando con ellos, los adultos deben de concentrar su atención en el juego.

    Los niños tienen una enorme imaginación y el saber compartirla con ellos, hace que el lazo entre padres e hijos sea cada vez más fuerte.

    Cuando se hace esto los niños se sienten más escuchados y atendidos ya que se les da a entender que lo que están haciendo y diciendo es muy importante.

  1. Brindarles pequeños trabajos: Al igual que el tiempo dedicado al juego, también es importante darle la oportunidad al niño de que pueda ir desarrollando otras habilidades y que sienta que su esfuerzo es valorado.

    Las primeras tareas que se les pueden pedir a los niños son las del hogar. Por ejemplo, se les puede pedir que pongan la mesa cuando se vaya a comer, que ordenen sus juguetes, que limpien el polvo, que laven los platos, que ordenar la ropa, darle de comer a las mascotas, etc.

    La finalidad es que los niños conozcan el valor del trabajo y puedan sentirse útiles y exitosos al finalizar cada una de las tareas asignadas.

    Los niños pueden sentirse orgullosos por su capacidad de organización a la hora de ordenar sus juguetes, sentir que ayudan a la familia al ordenar la ropa o al poner la mesa, etc.

    Es necesario prestar atención a aquellos momentos en los que pareciera que el realizar las tareas cotidianas comienza a perder su atractivo y motivar a los niños a que continúen llevándolas a cabo, haciéndolos más responsables.

  1. Brindarles tu atención: Al igual que dedicarles tiempo para el juego, a los niños se les debe de brindar la atención que se merecen.

    De estar manera se les envíe el mensaje de que lo que ellos sienten es lo suficientemente valioso. Existen distintas maneras en las que se les puede brindar la atención que se merecen, entre ellas se encuentran las siguientes:

    - Hacer contacto visual con ellos para que de esta manera sepan que realmente se les está escuchando y prestando atención.

    - Escucharlos sin juzgar y/o comenzar a hacer hipótesis de lo que van a decir. Simplemente escucharlos detenidamente y tratar de comprender lo que sienten bajo su propia perspectiva de las cosas.

    -Validar sus sentimientos y emociones sin juzgarlos.

    -Motivarlos a expresar sus sentimientos, expresando también los propios.

  1. Palabras de aliento: Los niños, al igual que los adultos necesitan ser reconocidos y apoyados.

    Se debe de tener cuidado cuando se trata de alentar y motivar a un niño ya que muchas veces solemos confundirnos entre dar palabras de aliento y elogiar.

    Los elogios, a diferencia de las palabras de aliento, pueden provocar que el niño sienta que es valioso únicamente cuando hace las cosas sin problemas. Sin embargo, las palabras de aliento reconocen el esfuerzo que hace el niño que lo ha llevado a obtener un determinado resultado.

    Por ejemplo, no es lo mismo decirle a un hijo: “¡Te quedó excelente ese dibujo!” a “¡Trabajaste muy duro en tu clase de dibujo y los resultados son excelentes! Buen trabajo”.

    Cuando se elogia demasiado a los hijos y nunca se les brindan palabras de aliento, se puede provocar que aparezca en ellos una constante necesidad de aprobación y que necesiten constantemente el elogio de los demás.

  1. Mejora tu propia autoconfianza: Hay que recordar que los padres son los modelos a seguir de los niños, por lo que si quiere conseguir aumentar su autoconfianza, se debe de comenzar por ellos mismos.

    Las necesidades de cada persona son distintas y puede ser que algunos tengan más desarrollados la autoconfianza que otros, dependiendo de eso se pueden tomar diferentes medidas.

    Entre las medidas que se pueden tomar es asistir a terapia psicológica para trabajar la autoestima y autoconfianza.

  1. Enseñarles a establecer y alcanzar objetivos: Es de gran importancia enseñarle a los niños a establecer pequeños objetivos alcanzables y realistas para que vayan poco a poco lográndolos y se sientan más seguros y confiados.

    Los objetivos tienen que ser a corto plazo ya que de esa manera los van logrando en menor tiempo y es más probable que la motivación no desaparezca.

  1. Hablar positivamente de ellos con los demás. Una manera de hacer que el elogio sea más significativo es elogiarlos de manera indirecta delante de otras personas.

    Es decir, hablar positivamente de ellos con otros aunque ellos estén haciendo otra cosa y escuchen sin querer los elogios.

  1. Nunca compararlos con los demás: Este es un gran error en el que suelen caer muchos padres y comparan a sus hijos con otros niños pensando en que así van a modificar su conducta para bien.

    Las comparaciones hacen que los niños duden cada vez más de sí mismos y piensen que no son lo suficientemente valiosos.

  1. Permitirles tomar decisiones adecuadas a su edad: Al igual que se les da la oportunidad de llevar a cabo las tareas domésticas, el que los niños puedan comenzar a tomar sus propias decisiones los hace sentirse más competentes.

    Hay que asegurarse de que las decisiones que tomen sean adecuadas para su edad. Por ejemplo decisiones como eligir que van a ponerse en el día, que quieren cenar, que lugar les gustaría visitar, que quieren jugar, entre otras.

  1. Motivarlos a probar cosas nuevas: Es necesario promover en los niños la participación en nuevas actividades y que puedan enfrentarse a nuevos desafíos.

    Algunos ejemplos de esto puede ser el animarlos a que practiquen algún deporte, que aprendan a tocar algún instrumento musical, que asistan a algún taller en donde aprendan una nueva actividad, etc. 

    El hacer esto va a provocar que los niños se sientan más capaces y confiados de que pueden llevar a cabo cualquier cosa que se les presente. 


¿Qué te parecieron estos consejos?, ¿has puesto en práctica alguno de ellos con tus hijos anteriormente?, ¿tendrías alguna dificultad para implementarlos?, ¿cuáles? ¡Me gustaría conocer tu opinión!Gracias por visitar mi blog de psicología y desarrollo personal, espero que este artículo haya sido de tu agrado y sobre todo que haya aportado algo positivo en tu vida.Si te ha parecido valiosa esta información, por favor no dudes en compartirla en tus redes sociales, nunca sabemos quien podría salir beneficiado. ¡Hasta la próxima!REFERENCIA:

Child Mind Institute. (2016, 11 noviembre). How to Build Boys’ Self-Confidence. Recuperado 7 octubre, 2019, de https://childmind.org/article/how-to-build-boys-self-confidence/