¿Cómo ayudar a una persona con depresión?

Por Convictorius @convictorius_

Cuando un ser querido se ve afectado por la depresión, puede ser difícil comprenderlo y saber cómo ayudarlo.

La depresión es una experiencia increíblemente compleja e individualizada. No existe una verdad o una solución simple que funcione para todas las personas.

La depresión es un trastorno grave pero tratable que afecta a más de 280 millones de personas en todo el mundo. Causa un dolor tremendo y lastima no solo a quienes la padecen, también afecta a todos los que están cerca de personas con depresión.

Antes de intentar ayudar a alguien con depresión, es mejor educarse a fondo en el tema. Comienza por subrayar estos puntos clave.

Puntos clave sobre la depresión:

  • Una persona con depresión no elige padecerla.
  • La depresión no es un defecto o debilidad personal. Es una condición de salud mental compleja que causa sentimientos de tristeza, un dolor emocional intolerable, desesperanza y en ocasiones conduce al suicidio.
  • Motivar a una persona deprimida a buscar ayuda profesional es la mejor ayuda que puedes brindarle.
  • Aprender a conversar con una persona deprimida puede hacer una gran diferencia en pro de su tratamiento y recuperación.
  • La familia y los amigos suelen ser la primera línea de defensa en la lucha contra la depresión.
  • Ser testigo de alguien que lucha contra la depresión es un desafío agotador y extenuante. Comprende que las emociones que experimentas, como la frustración, la impotencia, el miedo, la culpa o la ira, son respuestas naturales. 
  • Cuidarte a tí mismo también es importante. Valida tus sentimientos y prioriza tu propia salud mental dedicando tiempo a: pasatiempos, experiencias significativas, actividad física y otras relaciones valiosas y significativas para ti.

¿Cómo ayudar a alguien con depresión?

Bien. Si alguien a quien amas está deprimido, es posible que tú también estés experimentando una serie de emociones difíciles y oscuras

Es normal que todas esas emociones te asalten y salgan a flote mientras cuidas de alguien deprimido.

Aunque te sientas abatido, ten siempre presente que tu compañía y apoyo pueden ser cruciales para la recuperación de tu ser querido. Es por ello, que te animo a no rendirte y darle oportunidad a esta guía sobre la depresión adaptada para cuidadores de pacientes bajo diagnóstico.

Es importante que entiendas que lo que estás por leer, es una guía psicológica de inicio rápido sobre cómo ayudar a una persona con depresión. La misma, no pretende sustituir una psicoterapia para la depresión ni debe ser aplicada sin la supervisión y seguimiento de un psicólogo o profesional de la salud. 

Esta guía es un compendio de las estrategias de intervención psicológicas más eficaces que he validado y comprobado a lo largo de mi experiencia como psicólogo de pacientes con depresión. Aquí encontrarás respuestas a los siguientes preguntas:

  • ¿Cómo tratar a una persona con depresión? (la forma de acercarte e interactuar), 
  • ¿Qué decirle a alguien con depresión? (cómo comunicarte y conversar) y 
  • ¿Qué hacer con una persona con depresión? (qué actividades realizar junto a ella o por tu cuenta) para ayudar una persona con depresión.

Comencemos.

Recuerda que ayudar a una persona deprimida a buscar ayuda profesional es la mejor ayuda que puedes brindarle. Contáctame y programa una terapia psicológica para la depresión para ayudar a tu ser querido.

¿Cómo tratar a una persona con depresión?

Acércate y escucha sin juzgar.

Las personas deprimidas tienden a alejarse y aislarse de los demás. Por un lado, lo hacen porque ellos mismos no saben cómo explicar lo que sienten, y por otro, aún habiendo intentado siguen sintiéndose incomprendidos.

Es por ello, que la forma de acercarse y conectar es crucial.

La regla de oro: Ante todo recuerda que ser un oyente compasivo es mucho más importante que dar consejos. 

Escúchalo. Se paciente y ten la auténtica voluntad de escucharlo. La escucha empática libre de juicios es el primer puente de acercamiento e interacción.

Muy importante aquí: No pretendas que un único acercamiento o conversación sea suficiente para llegar a entender la complejidad de la condición depresiva de tu ser querido. Además, es posible que debas expresar tu voluntad de escuchar una y otra vez. Se amable, pero persistente.

Muestra tacto

A veces es difícil saber cómo tratar a alguien con depresión. Hay muchas cosas por hacer. Pero sin dudar, te diría que lo más importante luego de aprender a escuchar de forma empática es tener tacto. 

No bastan las buenas intenciones, ni tu auténtica preocupación por el cuadro depresivo de tu ser querido. Si no aprendes a interactuar con tacto es posible que se enoje, se sienta insultada o ignore tu interés en ayudarla. 

No tomes a modo personal los ataques y reacciones de una persona deprimida 

Es común que las personas deprimidas digan cosas hirientes y se enojen con sus cuidadores. La depresión dificulta que una persona se conecte a un nivel emocional profundo con personas cercanas e incluso con las que más ama. 

En interacciones difíciles o conflictivas con una persona deprimida, recuerda que es la depresión la que habla, no tu ser querido. Es por eso que no debes tomártelo como algo personal.

No hagas la vista gorda a la depresión

Ser indiferente, encubrir, ocultar o no darle valor al cuadro depresivo de un ser querido, no hará que desaparezca.

Pasar de puntillas frente a la depresión no ayuda en nada ni hace que se esfume.

De hecho, mentir a un amigo o familiar con depresión sobre su estado de salud mental y condición depresiva puede incluso evitar que éste busque tratamiento psicológico o psiquiátrico.

La depresión es una condición seria y delicada. 

No subestimes la gravedad de la depresión. La depresión agota la energía, el optimismo y la motivación de una persona y en ocasiones conlleva al suicidio.

No actúes como si pudieras “arreglar” la depresión de una persona. 

No tienes que tratar de “arreglar” a tu amigo o familiar; sólo tienes que ser un oyente empático y sensible a la lectura de sus emociones. 

Por mucho que quieras, no puedes rescatar a alguien de la depresión ni solucionar el problema por ellos. 

Actuar como si tuvieras la solución con la casi seguridad de tener entre tus manos la fórmula mágica puede hacerte ver arrogante y prepotente.

Asimila que no tienes la culpa de la depresión de tu ser querido ni eres el responsable de su felicidad. 

Si bien puedes ofrecer atención, amor y apoyo, la recuperación de una persona deprimida está en sus propias manos.

Aprende a reconocer los síntomas de depresión

Los síntomas de la depresión varían de persona a persona. Preocúpese si su ser querido:

  • Ya no parece importarle nada. Ha perdido interés en el trabajo, el sexo, los pasatiempos y otras actividades placenteras. Se aisla de los amigos, la familia y otras actividades sociales.
  • Expresa una perspectiva oscura o negativa de la vida. Se siente inusualmente triste, irritable, de mal genio, crítico o malhumorado; habla de sentirse “indefenso” o “desesperado”.
  • Empieza a tener sentimientos de inutilidad o culpa, obsesionarse con los fracasos del pasado o culparse innecesariamente de las cosas.
  • Se queja con frecuencia de dolores y molestias físicas como dolores de cabeza, problemas estomacales y dolor de espalda. O se queja de sentirse cansado y agotado todo el tiempo, incluso con tareas pequeñas que requieren mínimo esfuerzo.
  • Tiene insomnio o duerme más de lo habitual. Se ha vuelto indeciso, olvidadizo, desorganizado y «fuera de sí».
  • Come más o menos de lo habitual y ha ganado o perdido peso recientemente.
  • Bebe más o abusa de las drogas, incluidas las pastillas para dormir y los analgésicos recetados, como una forma de automedicarse sobre cómo se siente.
  • Menciona con frecuencia o de forma recurrente la muerte, pensamientos suicidas, interés por el suicidio.
  • Los niños y adolescentes pueden mostrar depresión mostrándose irritables o malhumorados en lugar de tristes. La depresión clínica no requiere una tristeza profunda. Más bien puede ser falta de emoción positiva en lugar de sentimientos intensamente negativos.

Al margen de todos estos síntomas de depresión es muy importante poder detectar:

  • ¿Cuáles son los síntomas de depresión más recurrentes de tu ser querido?
  • ¿Qué comportamientos o verbalizaciones son notables cuando la depresión empeora?
  • ¿Qué comportamientos o verbalizaciones son notables cuando a tu ser querido le va bien?
  • ¿Qué eventos o experiencias desencadenan los ataques de depresión más graves?
  • ¿Qué actividades ayudan a calmar más a tu ser querido cuando la depresión empeora?

Todas estas precisiones clínicas son valiosas en el diseño y tratamiento de la depresión. En caso de que tengas la respuesta comunícalas al psicólogo o psiquiatra de tu ser querido.

¿Qué decirle a alguien con depresión?

Encontrar una manera de iniciar una conversación sobre la depresión con tu ser querido siempre es la parte más difícil. 

Podrías intentar decir:

  • «Últimamente, me he sentido preocupado por ti».
  • “He notado algunos cambios en ti y me pregunto si todo va bien”.
  • “Quería hablar contigo porque te he notado distinta”.

Una vez que esté hablando, puedes hacer preguntas como:

  • «¿Cuándo empezaste a sentirte así?»
  • “¿Pasó algo que hizo que te sintieras así?”
  • «¿Hay algo que pueda hacer por ti en este momento?»
  • «¿Has pensado en buscar ayuda?»

Puntos clave en una conversación con una persona deprimida

  • Recuerda que una persona deprimida se encuentra en un estado mental confuso y sus funciones cognitivas (atención, memoria y lenguaje) no están en su 100%.
  • Trata de hablar con la persona deprimida con un lenguaje que pueda entender, utiliza frases y preguntas cortas a las que pueda responder sin sentirse abrumado.
  • Evita dar demasiados consejos o emitir juicios. El simple hecho de escuchar y ser comprensivo puede ser una poderosa herramienta de sanación.
  • Se solidario. Eso implica ofrecer aliento y esperanza permanente.

Lo que PUEDES decir:

  • «No estás solo. Estoy aquí para ti en este momento difícil”.
  • “Puede ser difícil de creer en este momento, pero esto pasará”.
  • “Por favor, dime qué puedo hacer para ayudarte”.
  • “Aunque me cueste entender cómo te sientes, me preocupo por ti y quiero ayudarte”.
  • «Eres importante para mí. Tu vida y compañia es valiosa para mí”.
  • “Cuando quieras rendirte, dite a ti mismo que aguantarás solo un día, una hora o un minuto más, lo que puedas manejar”.

Lo que debes EVITAR decir:

  • “Todo esto está en tu cabeza”
  • “Todo el mundo pasa por momentos difíciles”.
  • “Trata de ver el lado positivo”.
  • «¿Por qué quieres morir teniendo tantas razones para vivir?»
  • “No puedo hacer nada con respecto a tu situación”.
  • «Solo sal de eso y ya».
  • «Deberías sentirte mejor ahora».
  • «Tienes que levantarte de la cama».
  • «Tienes que salir».
  • «Tienes que entretenerte».
  • «No puedes seguir así».
  • «Así no vas a ninguna parte».